Museo de Antropología: El mismo pasado con nuevos ojos

AutorÉdgar Anaya

Fotos: Édgar Anaya

A muchos nos "mandaron" al Museo de Antropología en la secundaria. Como había que entregar una tarea y como entendíamos apenas un cinco por ciento de lo que decían las decoloradas cédulas explicativas (las que había, porque muchas faltaban) nos quedó una imagen aburrida de ese lugar.

Los nuevos descubrimientos

Actualmente la primera sala del lado derecho, "Culturas indígenas de México", recibe al visitante con la exhibición "Viaje al centro de la pirámide de la Luna". Se trata de un recorrido por los recientes descubrimientos en este edificio de Teotihuacán.

Tras una simulación del túnel de entrada a esta pirámide, una maqueta muestra su interior. En excavaciones en el suelo, con cubiertas de vidrio que se pueden pisar, se representan los entierros encontrados.

Las nuevas cédulas explicativas -puede decirse que casi son carteles- son grandes, algunas miden casi dos metros, con figuras o grecas de fondo relativas al tema de cada sala, colores vistosos y textos en español e inglés.

Muchos visitantes desconocen las salas etnográficas del segundo piso, porque se cansan al recorrer las de abajo y ya no regresan. Pero las salas de arriba son un derroche de color y un muestrario completo de vestimentas, artesanías y productos naturales indígenas.

Diversidad étnica

En la sala "Pueblos indios" se topa uno con un gran árbol de la vida, de dos metros, que representa la diversidad étnica. En ésta, como en casi todas las salas, ahora hay pequeñas áreas negras y semicerradas con seis bancas y una pantalla grande donde se ven con claridad videos relacionados con el tema. Además de descanso, se adquieren conocimientos de forma amena.

La museografía es creativa y modernista pero sin dejar de reflejar el tema de la sala. Así, en la parte de "El gran nayar", se forraron los muros con cuerdas vegetales de varios gruesos que les dan aspecto atractivo e indígena a la vez.

Utensilios, máscaras, indumentaria festiva de coras y huicholes se exhiben con amplitud, sin saturar el espacio. En varias de estas salas del segundo piso hay representaciones de las viviendas completas de los diversos grupos indígenas, con maniquíes vestidos y todos los detalles para dar realismo a la escena.

Una sala interactiva

En la sala "Purépecha" hay un área de botones y pantallas donde los niños interactúan con las voces que explican y preguntan sobre la lengua purépecha, sus tradiciones y la región donde vive este grupo indígena de Michoacán.

Los fotomurales dan la...

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