Que la muerte no lo agarre desprevenido
EL NORTE / Redacción
Para descansar en paz no hay como estar preparados.
De acuerdo con los expertos, la cultura de previsión no está premiada entre los regiomontanos, y comprar un lote funerario o un osario, antes de morir, no es una práctica común.
Una de las desventajas de no prevenir, es que en el último momento se acepta la primera oferta, sin ser necesariamente la mejor.
Daniel Martínez, gerente del Panteón Guadalupe, comenta que las madres de familia son más previsoras y quienes regularmente solicitan información sobre lotes funerarios u osarios.
Los principales panteones de Monterrey y su área metropolitan son El Carmen, Dolores, El Roble y Guadalupe.
Estos panteones se clasificar en dos tipos, el tradicional, que cuenta con monumentos en las sepulturas, y el estilo americano, que básicamente tiene pasto y se coloca una placa en cada lote funerario.
El Panteón Guadalupe es el único que cuenta con un espacio estilo americano, los demás son tradicionales.
La disposición de lotes funerarios en los panteones de El Carmen, Dolores y El Roble es limitada. Por ejemplo, en el Panteón del Carmen sólo quedan cinco lotes.
El precio de un lote funerario depende básicamente del tipo de cementerio, su ubicación y el número de gavetas que tiene, es decir, la capacidad de féretros que se pueden enterrar en el lugar.
"Mucha gente prefiere los terrenos cercanos a la entrada del panteón... y éstos son más caros que los del interior", dice Jorge Rodríguez, administrador Panteón de Dolores.
La administración de un panteón debe mantener limpios los pasillos y andadores, y el pasto o jardín en buen estado.
Algunos panteones tienen una cuota de mantenimiento. En el caso de el Panteón de Guadalupe se cobran 350 pesos anuales, por concepto de mantenimiento del césped.
El arreglo o mantenimiento de una tumba corresponde directamente a los propietarios.
Sergio Maltos Uro, director de Regulación Sanitaria de Nuevo León, comenta que al momento de requerir un lote funerario se debe exigir la entrega de aquel que se compró.
"Uno de los problemas recurrentes es que se vende un lote y al momento de usarlo no está preparado, por lo que se inhuma el cuerpo en uno diferente, y más tarde se tiene que solicitar su exhumación prematura (antes de los seis años)", dice Maltos Uro.
Cambiar de un lote no debe una decisión unilateral del panteón, ya que representaría una violación a los derechos del consumidor, comenta José Steel Garza, de Profeco.
... Y en polvo te...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba