Mucha música, mucha basura
| Autor | Gustavo Aréchiga |
"Esto es un marranero, compita. ¿A poco a esto también le llaman cultura? Ire, si todos nos pusiéramos un poco más buzos con la basura, y también si no se hicieran güeyes los del Gobierno y pusieran más botes, esto sería diferente. El Paseo Chapultepec sería una onda cultural completa".
El concierto de la sueca de cabellos rubios, Sonja Moonear, y el chileno Martín Schopf, fueron los más esperados por Jonathan Garavito, Octavio Cabrera y José Manuel Rodríguez, quienes montaban sus bicicletas ya muy pasada la medianoche del sábado, entre botellas de vidrio quebradas en el suelo y basura sobre Avenida Chapultepec.
Jonathan había puesto el ojo en ese "marranero" como otros tantos asistentes al evento que organiza sábado a sábado la Dirección de Cultura del Ayuntamiento tapatío. Y le habían llamado la atención, además, dos puntos que a su parecer no podrían faltar en actividades de este tipo: más baños, más botes.
De plano hubo negocio con las latas de cerveza arrojadas a la calle. Juan Mercado, un residente de la colonia El Fresno, recogía en una bolsa los desperdicios de metal. Entre el baile desaforado de Sonja y Martín, y la temperatura que subía sobre el asfalto de tanto movimiento, Mercado llevaba cinco kilos de latas que le comprarían a unos 50 pesos.
Lo que había empezado limpio, a la espera del eco electrónico de Micro Mutek, se había convertido en la madrugada en un sonar de vidrio. Eso sí: los semáforos en rojo, verde, rojo, amarillo..., sin tráfico.
"La basura no me parece, güey. Se necesitan más botes de basura, güey. Aprovechando que es un evento público y gratuito para la banda, tenemos que poner más conciencia, güey", decía Garavito.
Sonja, DJ y Martín, a cargo de la improvisación, lograron crear una atmósfera de fiesta que se prolongó hasta las 2:30 horas del domingo.
Antes del banquete electrónico a cargo de Juction SM, en el foro del evento también se presentaron grupos como Líneas de Nazca, de Imeca, Alejandro Dávila y Alejandro Merodio, Luis Flores, Jorge HM y Venancio Almanza de Nopal Beat; y Pier Bucci y Danieto, de la sociedad de SkipSapiens.
Mutek retumbaba en la preparatoria Lamar, en la esquina de Chapultepec y José Guadalupe Zuno. Ahí, dos policías correteaban cortésmente a quienes se acercaban a orinar detrás de un par de baños móviles. La fila era larga, las ganas urgentes.
Unos 34 minutos después de la medianoche, ya rozando el domingo, se...
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