Mónica Pérez Taylor / De aquí, de allá y de acullá
| Autor | Mónica Pérez Taylor |
Mientras los Mandatarios de las potencias económicas se reunían con sus Ministros y asesores para tomar medidas de emergencia y enfrentar la peor crisis del mercado en 60 años, Felipe Calderón, el gerente de la Sociedad Anónima de Capital Privado en la que han convertido a la nación mexicana, decide nadar contra corriente. Con su Ejército por delante, y sin descuidar los flancos, se transporta a La Yesca para el arranque de la construcción de una presa.
Fox ya había inaugurado el arranque de esta megaobra y prometió 10 mil empleos. Dos años después, hoy, en las entrañas del Río Santiago, en el Municipio de Hostotipaquillo, Jalisco laboran aproximadamente 80 trabajadores.
El Presidente (es un decir) del empleo (otro decir) utiliza La Yesca para hacer las mismas promesas, en sustitución mediática de su "Primer programa del empleo", que fracasó rotundamente en su primer año y, a saber, a donde fueron a dar 3 mil millones de pesos.
Excepcionalmente afortunados serán quienes logren obtener un empleo en La Yesca, mal pagados, sin derechos laborales y de alto riesgo; claro, siempre y cuando se hagan realidad, siendo que el déficit del empleo asciende a 5.5 millones.
Calderón llegó a La Yesca a prender los "motores de nuestra economía para que nos haga salir adelante", porque "pase lo que pase allá, en Estados Unidos, aquí, por decisión del Gobierno y de los mexicanos, aquí se construye una presa de las más grandes del mundo, y eso implica trabajo para la gente de aquí, y eso implica derrama para la gente de aquí", así lo ha dicho el señor aquí, en Jalisco. Pero los que sabemos un poquito más sobre presas y el Río Santiago de aquí, sabemos que nada de lo anterior va a ser cierto. Nunca ha sido así ni aquí, ni allá, ni acullá.
Allá, en el foro de Davos, magnates y economistas se quebraban la cabeza para entender las circunstancias de la actual crisis financiera mundial. Soros lo explicó: "la crisis actual es la culminación de un súper boom que ha durado más de 60 años, marca el fin de una era de expansión basado en el dólar como la moneda internacional de reserva y marca el fin de la era de la supremacía estadounidense".
Habría que festejar el fin de la era Bush sino fuera porque Bush y Dick Cheney son socios mayoritarios de Halliburton, empresa que, aun sin reforma energética, tiene ya 2 mil contratos millonarios, algunos bajo investigación, de Pemex. Si violando la Constitución han logrado esto, imagínese cuando sea legal.
Tengo el derecho a...
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