Su misión es ayudar

AutorReforma / Staff y con información de Tania Romero

REGALAN SONRISAS

La actuación circense es la forma en la que Victor Hugo Marmolejo, estudiante de Ingeniería Industrial y de Sistemas en la Universidad del Valle de México, regala alegría a pequeños y grandes.

De esta manera, asegura quien se caracteriza como el payaso "Viko", los ayuda a sobrellevar las pérdidas causadas por el sismo.

"Un corazón alegre hermosea el rostro y hace que estés feliz", indica.

En compañía de su padre y hermano, con quienes conforma el trío de Chopin y Los Fantásticos, Marmolejo presentó su espectáculo en distintos albergues y comunidades afectadas, entre ellas la de San Luis Tlaxialtemalco, en Xochimilco.

En ese pueblo, el alumno de 21 años, quien desde niño fue seducido por el oficio que forma parte de la tradición familiar, jugó con más de 20 pequeños, organizó una competencia en la que todos los participantes ganaron una bolsa con libros y juguetes, e invitó a bailar a algunas de las mamás, quienes también recibieron despensas y agua embotellada.

Cuando salió del escenario improvisado, saludó a los asistentes, se tomó fotos con ellos y se despidió de todos los presentes recordándoles que no estaban solos.

"A veces dicen que los mexicanos somos malos, flojos y rateros. Hoy se demostró que somos más los buenos, que hay más gente que quiere apoyar y hacer las cosas bien", expresó tras el evento.

Como estudiante de ingeniería, Marmolejo reconoce que sus estudios contribuyeron a mejorar el orden de los lugares donde ayudó, pues también hizo inventario de recursos y levantó escombros en el edificio colapsado en Coquimbo.

"A los millennials, a los cuales la gente les decía que son flojos y sin futuro, nos gusta ayudar. No sentimos miedo, sentimos la patria mexicana en el corazón".

CORROBORAN DATOS

La semana posterior al sismo, las manos de Julia Didriksson no levantaron un mazo ni un pico. En su lugar, un teléfono celular se convirtió en la herramienta de trabajo de la que dispuso para ayudar.

Después del temblor, la alumna de Estudios y Gestión de la Cultura de la Universidad del Claustro de Sor Juana limpió los baños de un albergue y sujetó una cuerda en Chimalpopoca para evitar que la gente pasara a los alrededores del inmueble colapsado, pero la joven de 22 años deseaba enfocar su energía en una actividad de mayor impacto.

El recién formado grupo #Verificado19S, que corroboró y organizó la información que surgió en las redes sociales durante la emergencia, necesitaba una monitora interna en la zona de desastre...

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