MIRADOR

AutorArmando Fuentes Aguirre

Jean Cusset, ateo con excepción de la vez que oyó a su hijo decir la primera palabra, dio un nuevo sorbo a su martini -con dos aceitunas, como siempre- y continuó:

-El cristianismo fue en su origen una religión apocalíptica. Los primeros cristianos tenían la certidumbre de que el fin del mundo estaba cerca. De ahí que su religiosidad los llevara al celibato y a la virginidad: ¿para qué tener hijos si el mundo ya se iba a acabar?

-De esa visión apocalíptica -siguió diciendo Jean Cusset- derivaron ideas y prácticas que prevalecen hasta nuestros días, y que si bien en su origen tuvieron explicación, carecen ahora de fundamento. El...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR