Son los miércoles pesadilla de presos
| Autor | Luis Cruz |
Para los reos mal portados, los miércoles son el peor día de toda la semana, pues deben acudir al Consejo Técnico Interdisciplinario para recibir una sanción por sus conductas negativas.
Todo comienza cerca de las 7 de la mañana: custodios van a cada dormitorio, recorren los pasillos para llamar a los internos que están en la lista de indisciplinados, recorren estancia por estancia hasta encontrar a cada uno de ellos.
Algunos tratan de esconderse, pero al final los "acusados" son llevados a la oficina a la que más teme la población penitenciaria en todos los penales: La Dirección.
Estadísticas del Sistema Penitenciario señalan que cada semana acuden cerca de 37 reos al Consejo de cada centro de reclusión, aunque esta cifra puede variar según el penal, pues en el Norte, Sur, y Oriente, el número de internos desobedientes disminuye.
Al llegar a La Dirección, los presos hacen una fila para poder ingresar por la puerta de esa oficina, al tiempo que agachan su cabeza, la pegan a la pared, y tras un gran silencio, el nerviosismo surge entre los que son llevados al jurado.
Clementina Rodríguez, directora ejecutiva de Prevención y Readaptación Social, explicó que las sanciones disciplinarias se aplican para mantener el orden interno, y así evitar grupos de presión o de dominación de otros internos, y van acorde con la gravedad o reincidencia de las faltas cometidas.
"Buscamos favorecer la reinserción social, ya que su récord disciplinario es un elemento de análisis para la tramitación y otorgamiento de beneficios de libertad anticipada", dijo.
Cuando por fin les llega su turno, con lo primero que se encuentran los internos es con una larga mesa llena de funcionarios dirigidos por el director de cada penal, mandos de seguridad penitenciaria, un criminólogo, un trabajador social, un psicólogo, entre otros especialistas en tratamiento de reos.
En esa reunión, el preso escucha los señalamientos en su contra, después él da su versión de los hechos y el Consejo determina si es responsable de alguna falta al reglamento, y si determina que así es, le impone una sanción.
Rodríguez indicó que las indisciplinas más comunes van de pequeños hurtos a compañeros, riñas, petición de dinero a cambio de protección, tener más de 10 salarios mínimos en efectivo, poseer objetos o sustancias prohibidas, o intentar o conspirar una evasión, y herir o privar de la vida a otro reo.
Especificó que las sanciones van desde una amonestación verbal, por escrito, suspensión de...
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