México y sus juguetes

AutorAbel Vázquez

Para Roberto Shimizu, director del Museo del Juguete Antiguo México (MUJAM), parte de la historia nacional se puede apreciar a través de sus muñecos y objetos de juego.

De acuerdo con el experto, si bien el verdadero juguete mexicano empezó a fabricarse y venderse en la década de los 20 bajo la influencia del nacionalismo, su época de oro fue entre los 40 y los 70.

"El juguete mexicano no son los trompos, los baleros, los yoyos o las canicas. Esos vienen con la humanidad y aquí los vestíamos de mexicanos. Es el reflejo político y social de la realidad mexicana y de la historia social".

Por ello, algunas de las primeras manifestaciones son de carácter militar: rifles, pistolas, atuendos, cascos y soldaditos.

"Comenzó una industria juguetera muy humilde, se basaba en tela, cartón, madera y herrerías", detalla el arquitecto.

Luego, la producción juguetera en el País se vio impactada por eventos históricos y de relevancia popular, tales como los Juegos Olímpicos, la filmación de las películas de King Kong y el apogeo de la lucha mexicana, por mencionar algunos.

Gran parte de este recorrido se puede apreciar en las distintas salas del MUJAM, espacio en la colonia Doctores con más de 45 mil piezas exhibidas y millones más en bodegas.

LEGADO ARTESANAL

Por más de 40 años, Sotero Lemus Gervacio ha continuado el legado que su padre, abuelo y bisabuelo le heredaron y le enseñaron: la confección de juguetes en cartonería.

Este oficio, comenta, proviene de Celaya, Guanajuato, ciudad donde elaboraban máscaras, charritos y muñecas.

"Mi aprendizaje fue directo de mis...

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