Desde México, FRIDA mira al espacio
| Autor | Israel Sánchez |
Después de casi dos décadas gestándose en la UNAM, una pieza clave para la actualidad y el futuro de la astronomía óptica infrarroja está cerca de ver, literalmente, la luz.
Se trata de FRIDA, siglas para inFRared Imager and Dissector for Adaptive optics, un instrumento con el que se podrán obtener imágenes de mayor nitidez desde el Gran Telescopio Canarias (GTC), en España, por medio de una tecnología similar a la utilizada por el Telescopio Espacial James Webb.
"Este es el bebé", señala el físico José Franco a Grupo REFORMA durante un recorrido por el Departamento de Instrumentación del Instituto de Astronomía (IA), donde los diferentes componentes y subsistemas de FRIDA han sido diseñados.
"Fue construido para hacer ciencia infrarroja de alta resolución espacial y espectral conjuntamente con un telescopio de 10.4 metros de diámetro (el GTC) y un sistema de óptica adaptativa", agrega la doctora en astrofísica Beatriz Sánchez y Sánchez, responsable técnica y gerente del proyecto.
FRIDA, de hecho, será el primer instrumento en hacer uso del haz corregido de dicho sistema en el GTC -el telescopio óptico infrarrojo más grande del mundo-, que es un método para moderar la turbulencia que produce la atmósfera y así conseguir la imagen más nítida posible, con una resolución espacial y espectral similar a si el instrumento fuera colocado en el espacio.
"El haz corregido lo hace el sistema de óptica adaptativa. Nos quita los efectos que produce la atmósfera en la luz que entra del espacio; corrige, y lo recibe FRIDA justo por esta ventana", explica Sánchez, apuntando la pequeña entrada circular al centro del criostato dentro del cual se encuentra el instrumento.
Y es que, explican los investigadores del IA, al estar hecho para observar en el infrarrojo cercano -entre 0.9 y 2.5 micrómetros-, es necesario que el sistema opere a temperaturas criogénicas, inferiores a -150 grados centígrados.
"Por eso el aparato, donde está metido el detector, es un criostato, que es un termo para mantener las bajas temperaturas", ilustra Franco sobre la enorme y hermética caja gris, cuya pesada tapa debe ser levantada por una grúa.
Aquí, primero, un sistema de bombeo genera las condiciones de vacío en el criostato, para que posteriormente con nitrógeno líquido y refrigeración con helio se consiga el enfriamiento necesario. Además, un par de escudos térmicos reducen la transmisión de calor -procedente del ambiente- de afuera hacia adentro.
"Este sistema está diseñado...
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