Mexicar / Odiar será delito

AutorEnrique Canales

En la guerra contra el terrorismo, los analistas no se logran poner de acuerdo sobre quién se está peleando contra quién. Para mí, no es cierto que Estados Unidos, Inglaterra y su coalición se estén peleando contra Iraq y contra Afganistán. Aunque muchos no lo crean, esta coalición ayuda con sus ejércitos a los demócratas de Iraq y Afganistán a combatir a los totalitarios fundamentalistas para tener una oportunidad de establecer sus democracias formales.

Hay quienes piensan con demasiada simpleza que la coalición quiere quedarse con el petróleo de la región o quiere instalar gobiernos peleles en Iraq y en Afganistán. Aclaro: critico a los americanos cuando sus acciones quitan la libertad a favor de su imperio, pero los apruebo cuando sus acciones militares han liberado a países de sus dictadores y teocracias nefastas como el gobierno de Sadam y el talibán. Al cabo, una democracia ya establecida siempre pide manos fuera a Estados Unidos y demás potencias, como sucedió en Japón, Italia y Alemania.

La intelectualidad antiliberal, con tal de vituperar a Estados Unidos, apoya a Fidel Castro sólo porque es antinorteamericano, sin importar si este tirano esclaviza a nuestros hermanos cubanos de la isla. Los antiliberales han de simpatizar con Hugo Chávez, por lo mismo.

Ni el gobierno de Iraq ni el gobierno de Afganistán se están peleando contra Estados Unidos, Inglaterra o contra los demás países de la coalición. Lo aclaro porque a estos intelectuales, especialmente franceses y españoles, les interesa que la guerra se vea como la guerra de los iraquíes defendiéndose de la agresión americana. Por eso, leen mal la historia y favorecen en esta contienda a los terroristas totalitarios.

Claro que critico a Estados Unidos cuando históricamente prefirió a las dictaduras sólo porque lo apoyaban en su lucha contra los fascistas o los comunistas. Por eso, los americanos cometieron atrocidades apoyando a matones y dictadores de la peor estirpe, por ejemplo, apoyaron a Franco, a Osama en Afganistán, al Sha de Irán, a Pinochet y a cuanto generalete dictadorcillo se prestaba para combatir a la guerrilla comunista en Latinoamérica.

Ahora el pleito no es para imponer la paz americana, se pelea por la paz de los ciudadanos libres para votar y vivir un poco más a sus anchas. El terrorismo es la punta exterior de un intento por evitar la imposición democrática en varios países, incluyendo por lo pronto al Líbano, Palestina, Iraq y Afganistán. Pero pronto avanzará la...

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