Mexicar / Chuecos, desde antes
| Autor | Enrique Canales |
La legalización de los coches de contrabando que circulan en el país, se hace por muy malas razones y peores motivos. Pareciera que estamos tratando de echarle tierra a errores, corrupciones, abusos, contrabandos, contaminaciones y pésimas medidas económicas anteriores. En contraste, siento un inmenso gusto porque gente más pobre se acerca un poco más a tener su "mueblecito".
Es injusto constatar que un pobre gringo puede comprar un coche al precio de lo que nosotros pagamos por sus cuatro llantas. El liberalismo exige que un mexicano pobre no debería pagar más de lo que paga un gringo pobre. ¿Por qué los coches usados en México son más caros? Porque nos estorbamos con impuestos, trámites, aranceles, tenencias, financiamientos, corrupciones y proteccionismos. Conste nuestros impuestos y trámites todavía no son competitivos.
En México, la ideología nacionalista de protección al supuesto mercado interno, significa la protección a gremios, a distribuidores, a comerciantes de partes y a productores nada competitivos. Esa misma ideología nacionalista exige cargarle la mano a los consumidores, y a eso me refiero con lo "chuecos, desde antes". Ojalá don Juan Ramón de la Fuente comprenda que el proteccionismo nacionalista a campesinos poco competitivos también nos hace más pobres.
Prevalece en el PRI, el PAN y el PRD, un anhelo de proteger al productor incompetente y con esa excusa, anhelan cobrar tarifas, impuestos y servicios aduanales a todo, en vez de que todo cruce la frontera sin dilación para facilitar nuestro desarrollo y entonces, cobrar los impuestos a la venta de productos y a las utilidades.
Cuando dicen que llevamos 20 años de liberalismo, me río, pues no tenemos una idea de lo que nuestras políticas proteccionistas, nada liberales, han impedido el desarrollo de empresas y su consecuente generación de empleos. En otras palabras, nos bloqueamos, nos cobramos impuestos, trámites y corrupciones, para no desarrollarnos. Por eso, es mucho más sano cobrar el IVA a la hora del consumo y las utilidades cuando se produzcan.
Ese castigo a los consumidores y esa protección a los productores y comercializadores incompetentes, infla los costos reales, de modo que se vuelve un gran incentivo corromper millones de veces a los aduaneros a 100 dólares por mueble. ¿Ha logrado Hacienda detener a uno sólo de sus aduaneros por contrabando? Cínicos.
Es grande el sufrimiento de...
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