Llega la guerra a familias mexicanas: Sienten miedo, pero se dicen orgullosos

EL NORTE / Especial

Tiene 20 años, por sus venas corre sangre mexicana, es hijo de padres guanajuatenses y está listo en Japón, en la reserva de una base militar estadounidense en aquel país, para entrar en acción en la zona de conflicto con Iraq.

Es Andy Aranda Pedroza, hijo de Consuelo Pedroza y José Aranda, un matrimonio originario del municipio de Ocampo, Guanajuato, pero que desde hace 35 años vive en Chicago, Illinois, donde ha consolidado su familia y su patrimonio.

"Sí, tengo algo de miedo, pero me siento muy orgullosa de él, de que ande por allá, de que defienda a su país. Ya le dije que en cuánto termine la guerra lo voy a llevar a México para ir a darle gracias a la Virgen de Guadalupe", comentó vía telefónica Consuelo Pedroza.

Apenas hace 2 años, Andy Aranda se graduó en la base naval de San Diego, California. Estudia Ingeniería en Comunicaciones en la Marina.

Acababa de regresar de una misión de Filipinas, estuvo unas semanas en Carolina del Norte y lo enviaron a Japón, donde está ahora.

"Me acaba de hablar el fin de semana y me dijo: 'no te apures, mami todo va a salir bien, tenemos mejores armas, estamos mejor entrenados, algunos compañeros míos están enojados porque no ven la hora de entrar en acción', pero yo creo que él piensa lo mismo", recordó.

No es la primera vez que Consuelo Pedroza sabe lo...

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