Memoria artística regia

AutorDaniel de la Fuente

"Dar un espacio permanente a su obra, convertirla en síntesis de la identidad cultural de los nuevoleoneses y ofrecerla a la contemplación del visitante" son los objetivos que formaron parte de la cédula inaugural de la Pinacoteca de Nuevo León, que en su nacimiento el 13 de julio de 1990 se estableció como sentido difundir la obra de artistas vinculados a la plástica nuevoleonesa.

Se agregó: "Emigrantes unos, en concordancia con el destino de quienes han sido atraídos por el carácter industrial de Monterrey, capital del Estado de Nuevo León; emigrados otros en el afán de explorar nuevos territorios estéticos, forman al lado de los creadores que se han formado en la localidad, una vasta constelación de artistas cuya obra tiene sus raíces en el suelo de esta geografía".

La Pinacoteca abrió en recintos del antiguo Campo Militar, hoy Parque Niños Héroes. Su primer director fue el promotor José Doria, quien alguna vez en entrevista dijo que el proyecto de un espacio para el arte local nació durante la gestión de Alfonso Martínez Domínguez y se consumó en la gubernatura de Jorge Treviño.

Así, los cuarteles que sirvieron como Pinacoteca estuvieron destinados en un principio a un museo de arte contemporáneo.

"Yo vi los planos y vi el nombre: Museo de Arte Contemporáneo", dijo Doria, fallecido en el 2014. "Tanto se entusiasmaron los inversionistas de aquel proyecto que mejor se lo llevaron al centro de la ciudad y erigieron lo que hoy es Marco.

"El problema después fue: ¿y ahora qué hacemos? Alguien recordó por ahí que existía el patrimonio artístico del estado guardado en las bodegas de la Casa de la Cultura, distribuido en las oficinas de Gobierno. Se hizo una lista de artistas y se comenzó a buscar obra. Así, rápido, porque ya era próxima la fecha de inauguración y el Presidente (Carlos Salinas de Gortari) vendría a realizarla".

La apertura, de acuerdo con la crónica de entonces, duró 15 minutos.

El espacio difícilmente logró crear públicos, debido a que se volvió rehén del parque, y frecuentemente recibía críticas por limitaciones presupuestales e improvisaciones.

Sin embargo, logró rescatar de despachos y bodegas cerca de 700 obras de 174 artistas, nacidos algunos entre fines del siglo 19 y, la mayoría, durante el 20.

De aquellas obras lograron exhibirse alrededor de 250. El público pudo apreciar piezas como el excepcional autorretrato de Alfredo Ramos Martínez, de 1943, o la emblemática escultura "La ola", de Fidias Elizondo.

CUMPLE VOCACIÓN

...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR