De Memoria / Un acto vulgar
| Autor | Sealtiel Alatriste |
27 de diciembre de 2004: Después de una lucha denodada contra su tercer cáncer, muere la escritora estadounidense Susan Sontag.
En El declive del imperio americano -la película del cineasta canadiense Denys Arcand, que expuso la moral sexual dominante al principio de los años ochenta- uno de los personajes dice que el ideal de cualquier intelectual sería acostarse con Susan Sontag. Había olvidado que la secuencia quería ser humorística, pero ahora que volví a ver la reedición de la cinta que se hizo en DVD, me llamó la atención la insistencia, sin duda simbólica, acerca de la importancia intelectual de la Sontag, sobre todo por la coincidencia de que hubiera fallecido dos días antes de volverla a ver.
El filme quería mostrar que a pesar de la revolución sexual de los años sesenta, la burguesía, intelectual o no, seguía comportándose con los patrones de antaño, y le asustaban y le pesaban los estereotipos de siempre.
La primera mitad transcurre en dos planos, un grupo de cuatro mujeres y cuatro hombres, que se reunirán poco después en un almuerzo, hablan de sexo. Tanto ellas como ellos son académicos, o mejor, personas ilustradas, y hacen ostentación de una libertad de pensamiento donde adivinamos que el desparpajo sexual es su único refugio. Han estado en orgías, se han tirado a cuanto dios se les ha puesto enfrente, les divierten sus experiencias sadomasoquistas, pero cuando una de las mujeres se entera que su pareja se ha acostado con sus amigas, sufre una crisis de conciencia que la "obliga" a divorciarse. Este hombre, que como diría mi abuela, se acostaba con lo que se moviera, es quien tenía como ideal llevarse a la cama a Susan Sontag, y será él mismo quien, en la siguiente película del director, Las invasiones bárbaras, hará un recuento de los fracasos académicos, sentimentales y eróticos de su generación.
La alusión a Susan Sontag no es gratuita y tiene un peso específico en el filme. Durante años ella representó la libertad que la sociedad norteamericana buscó con fervor en los años sesenta. Desde sus Estilos radicales y los Ensayos contra la interpretación, pasando por su memorable reportaje sobre la guerra de Vietnam, Viaje a Hanoi, fue el baluarte de un modo oblicuo de juzgar que quería establecer una nueva libertad de pensamiento. Si Estados Unidos estaba destinado a convertirse en el paladín de la democracia en la segunda mitad del siglo 20, sólo lo lograría con una intelectualidad que sorteara los baches de las convenciones...
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