'Los mejores autores son de la derecha'
| Autor | Jorge Ricardo |
La poesía propone una interrogación perpetua, sostuvo en entrevista el poeta argentino Fabián Casas (Buenos Aires, 1965), quien por segunda ocasión visitó la Ciudad de México para ofrecer hoy un recital en La Casa del Poeta junto con poetas mexicanos.
"La poesía siempre está preguntando, no da certezas, lo que responde es el periodismo, la publicidad", dijo.
Considerado uno de los mejores poetas vivos de su país, Casas aseguró que sus obras buscan la igualdad económica y el respeto a la diversidad cultural y que en ese sentido él es una persona de izquierda.
Sin embargo, agregó, "en lo general los mejores escritores son los escritores de derecha".
Porque los poetas de izquierda "tienden a ser pedagógicos y a adoctrinar, por ejemplo, la obra de Juan Gelman que es más pedagógica y trata de adoctrinar es la más y la parte en donde no piensa en todas esas cosas es extraordinaria para mí", expuso.
La lucha por la igualdad y la defensa de los derechos humanos, es una tarea difícil, dijo Fabián Casas.
"La naturaleza en sí misma es de derecha, por eso tiende a destruir; en cambio la izquierda que es algo que se imagina como un lugar donde toda la gente viva de una manera más igualitaria, con ingresos para todos, es una cosa que es casi como un cáncer, que no existe y que cuando quiere aparecer inmediatamente la naturaleza la reordena y la mata".
En 2007, Casas obtuvo el Premio Literario Anna Seghers, un certamen alemán que promueve nuevas generaciones de escritores latinoamericanos que abogan en sus obras "por el progreso histórico y social".
El miércoles, Fabián Casas asistió a una conversación pública con el mexicano Hernán Bravo Varela, también en la Casa del Poeta, acerca de su manera de escribir y su oficio de escritor, y ayer también leyó poemas.
El poeta es además novelista y periodista; autor de Otoño, Poemas de Desintoxicación y Tristeza (1985), Tuca (1990), El Salmón (1996), El Spleen de Boedo (2003) y Los Lemmings (2006), entre otros.
La poesía renueva el lenguaje y modifica la vida. El instante poético, consideró, no siempre está escrito.
"En Argentina he dejado de asistir a los encuentros de poesía porque en ellos no había poesía, me aburría profundamente, eran un campeonato de egos de los escritores, siempre dispuestos a dar certezas. Todos parecían tener la respuesta y yo creo que la gran poesía, aunque aparente afirmar está puesta siempre en estado de pregunta".
Hay quien intente definir lo que es...
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