Nombres, Nombres y ... Nombres/ Anuncia IMSS otra mecánica para abasto de medicinas y pone a temblar a proveedores
| Autor | Alberto Aguilar |
ESTE MIERCOLES FUERON citados al auditorio del Centro Médico Siglo XXI, los representantes de un centenar de compañías que en distintas proporciones proveen medicamentos al IMSS, que lleva Santiago Levy.
El responsable del ámbito administrativo y también de las compras que es Guillermo Ibarra Ponce de León, a saber sobrino de Ernesto Zedillo, anunció a los ahí presentes una pésima noticia que nubló su futuro como negocios.
Se trata de un cambio radical en la mecánica de proveeduría, en la que por primera vez se licitará sólo para cubrir el primer semestre ya en curso, y no todo el año que era lo que se acostumbraba.
En realidad la recalendarización del esquema fue lo de menos, ya que además se informó que los interesados ya no sólo deberán llevar las mercancías a unas 38 delegaciones del IMSS, incluidas las cuatro del DF, sino a cada una de las mil 800 unidades médicas de ese instituto.
Ibarra justificó la medida con la necesidad de enfatizar toda su atención en el servicio de salud, y no tanto en la distribución, actividad que se busca sea un servicio que se pueda recibir íntegramente de manera externa.
Igual se pretendería eliminar de una vez por todas el desabasto, mal ancestral en el IMSS, que ha crecido más que otra cosa por las deficiencias operativas.
Se cree sin embargo, que el nuevo esquema traerá aún más complicaciones, dado que su lanzamiento se dio sin ningún preparativo, y lo peor, sin abrir un periodo que permitiera en el largo plazo la adaptación a muchos de los proveedores.
La gran mayoría de las empresas que hoy distribuyen medicamentos al IMSS están incapacitados para cubrir las mil 800 unidades, máxime cuando incluso se requiere equipo de refrigeración muy costoso. En ese contexto sólo dos compañías cuentan con esa infraestructura, Grupo Saba de Isaac Saba y Nadro de Pablo Escandón Cussi, ahora esencialmente orientadas al mercado privado donde ya cubren en conjunto un 60 por ciento de las necesidades.
Bajo la nueva mecánica anunciada, existe el riesgo de que el IMSS dependa de un par de proveedores, junto con algunos otros que puedan incorporarse de forma regional y acotada.
Los propios laboratorios de medicamentos también se verían afectados, puesto que adicionalmente existe el proyecto de desaparecer la presentación para el sector público, y descansar en los genéricos intercambiables y en las marcas tradicionales que concurren al mercado. Se cree que ese podría ser otro paso en falso al alentarse otro vicio ya muy...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba