Maternidad las motiva a mejorar

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 10 (EL UNIVERSAL).-Ser deportista de alto rendimiento en nuestro país no impide que las mujeres concreten el sueño de convertirse en madres y continuar después con su carrera. Para algunas, la pausa acontece sin contratiempos, mientras que para otras el proceso resulta complicado.

"Me mantuve activa hasta los cinco meses de mi embarazo y por fortuna mi recuperación fue muy rápida. Gracias a mi entrenador Adrien Gaillard pude volver a la actividad de forma rápida y ya realizo trabajo de preparación física con resistencia. Mi hija es una gran motivación para encarar el ciclo", dijo la velerista Demita Vega, medallista panamericana y mundial.

A mediados de este mes reaparecerá la doble medallista olímpica Paola Espinosa, quien el año pasado se convirtió en madre de Ivana. La clavadista busca un lugar en la selección que participará en los Juegos Centroamericanos en julio próximo.

"Mi hija es la motivación para alcanzar mi mejor nivel. Tengo muchas ilusiones de llegar a los próximos Juegos Olímpicos, y que mi niña me vea peleando por otra medalla", compartió.

La pasión por el deporte se hereda, comentó la ex clavadista y jefa de misión para Barranquilla 2018 Marijose Alcalá.

"Se madre y deportista olímpica implica dar un ejemplo a mi hija de esfuerzo, disciplina, perseverancia, de respeto, amistad y excelencia. El deporte me ayuda a que mi hija Victoria Sofía lo practique por salud y como un estilo de vida".

Este...

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