Las mascotas no son juguetes

Para los niños resulta muy sencillo pedir una mascota y pensar en ella como un juguete más de la colección, pero tener un animalito en casa es toda una responsabilidad y requiere más cuidados de los que aparenta.

Por eso, antes de cumplir el sueño de sus hijos, es importante que los pongas sobre aviso de cuáles son las obligaciones que adquiere el dueño de una mascota, los derechos que tienen los animales y que el compromiso que se asume al adquirir un cachorrito es de por vida.

La importancia de una mascota

Tener una mascota representa para los niños la oportunidad de cuidar de alguien más, aparte de sí mismo, por lo tanto les ayuda a ser menos egocéntricos, más considerados y responsables.

En muchos hogares, las mascotas pasan a ser parte de la familia, para los niños representan un amigo, un compañero o un cómplice, pero cualquiera que sea el rol, es seguro que deja en los pequeños recuerdos imborrables y felices.

A través de las mascotas los niños adquieren sensibilidad, compasión y empatía, se vuelven protectores y adquieren confianza en sus capacidades a lo largo del proceso de ver crecer a su cachorro como un animalito fuerte y saludable y saberse en parte responsables de eso.

Un ser con derechos

Al adquirir una mascota, es importante que los niños comprendan que los animalitos son seres vivos que tienen sentimientos y sensaciones, que les duelen los golpes, sienten hambre, se enferman y sufren igual que los seres humanos.

No se trata de un juguete al que se puede golpear, aventar o dejar encerrado en un armario, la mascota necesita comer, recibir un buen trato, un lugar cómodo para dormir, y atención médica en caso necesario.

En 1978, la Liga Internacional...

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