Su marido le permite brillar más

AutorMinerva Hernández

Enviada

ACAPULCO.- Hay mujeres que al estar junto a un hombre poderoso y multimillonario pierden su brillo, pero en los casi cuatro años que Salma Hayek lleva casada con el magnate Francois-Henri Pinault ha logrado mantener su independencia. Esto ha sido posible, afirma, en mucho por la disposición y el apoyo de su marido.

Y aunque reconoce que no siempre tuvo la suerte de estar junto a un hombre que la apoyara y se sintiera feliz con su éxito, ahora disfruta sentirse amada y respaldada.

"Cuenta mucho a quién escoges, no me puedo dar yo el crédito. Cuando te toca un hombre que no te deja ser, que te ahorca, que te reprime, que no quiere que crezcas y estás viviendo con él todo el tiempo y no se pone feliz con tus logros, que al contrario, te hace sentir culpable, es una piedra para cargar en la vida. Es muy difícil salir adelante así.

"Yo tuve la gran fortuna de encontrar un hombre que me quiere por quien yo soy, que nunca trató de cambiarme, que me apoya, que celebra mi locura y mi creatividad, que la aprecia y que, lejos de limitarme, me inspira muchísimo. Muchas veces, cuando no puedo más, es de él de quien me agarro", dice la mexicana en entrevista.

Pero su esposo no sólo la apoya en su carrera, también lo hace en casa, cuidando a la hija de ambos.

"Ahora que vine (a Acapulco), él se quedó a cuidar a Valentina", menciona la actriz, quien llegó ayer al puerto para recibir un reconocimiento dentro del Festival Internacional de Cine Acapulco, el cual le otorgarían anoche durante la ceremonia de clausura.

Esta distinción la recibe a días de ser considerada por la revista Forbes una de las 50 mujeres más poderosas a nivel nacional (ocupa el lugar 19). Sin embargo, asegura, ella sólo se siente poderosa en su hogar.

"Es un honor grandísimo para mí, aunque ya no viva aquí (pues radica en París). Creo que siempre una parte de mí y de mi espíritu está aquí.

"(Pero) no me siento poderosa, o depende de lo que consideren poder. Pienso que, de alguna manera, si eres una persona que está en la vista pública, tienes cierta influencia, pero poderosa lo soy dentro de mi casa, dentro de mí misma, y a veces no lo soy ni para aguantarme y no comerme un pastelito. Al mismo tiempo, todas las mujeres somos poderosas...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR