Marcan paso hacia libertad

AutorArturo Espinosa

TOLUCA.- Esencial para arribar a la Ciudad de México, el Edomex guarda en su territorio huellas de la lucha de Independencia de México.

Margarita García Luna, cronista de Toluca y estudiosa del tema, destacó la importancia que la entidad tenía para lograr el triunfo en esta gesta.

"Luego de los acontecimientos de 1810 (el Grito) en Dolores Hidalgo (Guanajuato), los insurgentes encabezados por (Miguel) Hidalgo pasaron por el Estado de México, la idea era que el ejército rebelde se dirigía a tomar la capital del País.

"Sabemos que algunos de los primeros puntos por los que pasó fueron las haciendas de Tepetongo y La Jordana, en el actual municipio de El Oro", expuso.

Fue precisamente en la Hacienda de La Jordana, añadió, donde se surtieron de víveres y partieron a San Felipe del Obraje, el actual San Felipe del Progreso, donde Hidalgo fue recibido con el repique de las campanas y festejos.

El siguiente destino, indicó García Luna, fue Ixtlahuaca, donde el 27 de octubre ocurrió un hecho relevante para el llamado Padre de la Patria.

"Nos dicen que en ese lugar fue recibido, junto con su comitiva, con un repique de campanas y fue ahí donde se presentaron los edictos de excomunión por parte de Manuel Abad y Queipo, Obispo de Valladolid (Morelia) en contra de Hidalgo y sus seguidores.

"Se les convoca para hacerles un proceso en el Tribunal de la Santa Inquisición, ante ello Hidalgo y sus seguidores rompen esos edictos, los pisan ante el júbilo de todos los insurrectos", narró la cronista.

Un día después, las huestes independentistas llegan a Toluca donde también reciben ovaciones y aclamaciones.

Ahí, Hidalgo fue llevado a la casa de José Mariano de Oláes, donde pernocta; actualmente esta casa es el Museo José María Velasco, en el centro de Toluca.

El ejército insurgente, entonces ya de casi 80 mil personas, prosiguió su andar y, en San Mateo Atenco, Ignacio Allende decide dividir el contingente: una parte se va con Hidalgo por Tianguistenco, y la otra por Lerma.

Cruzan los municipios de Chapultepec y Mexicaltzingo y finalmente llegan al Monte de las Cruces, en Ocoyoacac, donde el 30 de octubre la victoria sobre el ejército virreinal les abre la puerta a la Ciudad de México.

Hidalgo victorioso se dirigió a Cuajimalpa, pero decide regresar al Bajío y cruza los municipios de Xonacatlán, Otzolotepec, Temoaya, Jiquipilco, Timilpan y Aculco, donde se desarrolló una nueva batalla...

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