Maravilla de fama mundial
| Autor | Stephanie Kukutschka |
El delicioso grano de soya ha sido cosechado en China por más de tres mil años, pero el descubrimiento culinario, su versatilidad y sus beneficios se ha ido incrementado en el lado occidental.
María Elena Herrera, instructora de cocina vegetariana y de nutrición en la Gran Fraternidad Universal, explica que la soya es un alimento originario de China, Japón y Corea.
"A comienzos del siglo 20 se descubrió que podía utilizarse en copos, harina, leche y aceite, entre otras cosas. Y empezó a usarse en Europa y en los Estados Unidos durante las guerras mundiales para compensar la escasez de la carne", señala.
La soya es la leguminosa más cultivada y utilizada a nivel mundial, además de que es una de las más investigadas y promocionadas en la actualidad por los nutrientes que posee.
Herrera comenta que la soya es de la familia de las leguminosas por sus semillas con gran cantidad de aceite y proteínas.
"El frijol de soya es una leguminosa cuya proteína es muy completa. La soya puede complementarse o sustituir las proteínas animales, agregando variedad de ingredientes a la comida diaria".
"Es rica en proteínas, fibra vegetal y minerales, por lo que es bueno empezar a consumirla con moderación", agrega.
La soya es un alimento muy nutritivo para el organismo, expresa; sin embargo, debe consumirse con moderación porque contiene fitoestrógenos, que son hormonas que se encuentran en la planta y que para las personas que tienen tumores y son sensibles a los estrógenos, no es buena idea consumir este alimento.
De igual manera la soya, si se consume en gran cantidad, puede alterar el metabolismo, por lo que la digestión se va haciendo más lenta que lo normal.
"El consumo excesivo de la soya puede afectar los órganos reproductivos y la tiroides, pues disminuye la testosterona, y los hombres pueden sentir una desactivación sexual y una disminución en el esperma", dice la instructora.
Algo bueno de la soya es que es de mejor calidad que la proteína animal, pues contiene un gran alto proteico y los ocho aminoácidos esenciales para el crecimiento del ser humano, excepto en la lactancia, además de que es un alimento digestivo.
Son muchos los derivados que se pueden preparar con la soya para su consumo, siendo los más comunes la leche, el aceite, el queso llamado tofu, la margarina, los germinados de soya, la carne vegetal texturizada, la salsa de soya o tamari, la harina y la lecitina de soya, entre otros.
Hay diversas formas de consumirla, siendo las más...
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