Maradona: Con alma de 'Chavo'
| Autor | Héctor Quispe |
México.- Diego está tan a gusto que decide brindarse en una faceta que sólo sus amigos íntimos comparten, su carisma como relator de anécdotas, de cuentos, del dolor y la alegría.
"Cuento anécdotas, ¡pero en la sobremesa!", aclara antes de reír a carcajadas y los ojos se le reducen a casi nada.
Se le nota relajado y se mece sobre el mullido sillón. Juguetón, disfruta que ha perdido mucho del sobrepeso que tenía cuando hace casi cinco meses se marchó de emergencia a Cuba, donde radica mientras es rehabilitado de su adicción a la cocaína y sus trastornos cardiacos. Viste como colegial, predominando su color favorito, el negro, en su camiseta y zapatos deportivos bajo sus pants grises. Se ve ahora mucho más joven de sus 39 años.
Dentro de tantas vivencias, saca a la luz la que le tatuó el alma...
"Creo que los que jugamos al fútbol mucho tiempo, como el caso mío, que yo empecé a los 15 años, es como yo siempre se lo digo al 'Matute', cuando habla el 'Flaco' (César Luis) Menotti...
"Un día... Yo quiero mucho a Mario Kempes, lo adoro por el hecho del respeto que él le tenía al jugador de fútbol. Esta es la anécdota:
"Estábamos en el Mundial del 78, yo no era titular del Argentinos Juniors, pero (el seleccionador) Menotti me llevaba con la selección mayor y yo estaba con los grandes, estaba Kempes, estaba (René Orlando) Houseman, estaba (César) Tarantini... Tomaban whisky después de comer y entra (Ricardo) Pizzarotti, el preparador físico, quien nos mandaba a dormir a todos.
"Entonces, claro, cuando entra (a esa habitación), ¿a quién va a mandar a dormir primero? ¡Pues al pibe! Y yo, cuando entró, me dije 'bueno, mañana estoy en mi casa'. Pero no, la anécdota pasa porque el que me bancó a mí a muerte fue Mario Kempes, y yo le estoy agradecido toda la vida. Por eso digo que todos somos iguales en el futbol.
"Yo tenía 17 años, estaba a las 11 de la noche ahí, pero hice una carrera de 20 y no es que no me estuviera cuidando sino que estaba compartiendo algo que a mí me nutría de orgullo porque estaba alrededor de grandes. Cuando el 'Flaco' dijo que fuéramos a dormir, Mario le respondió que seguiríamos porque habíamos trabajado todo el día y merecíamos estar ahí, sin faltarle el respeto al 'Flaco' Menotti. Eso me marcó toda la vida.
"De entrada, esa es la anécdota que les cuento siempre a mis hijas, que me piden una siempre antes de dormirse. Y les he contado mentiras también para saber si dormían. Pero esa es una de las anécdotas lindas que viví, y...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba