Rafael Fernández de Castro / Malo por conocido y por conocer: las personalidades de Bush y Kerry

AutorRafael Fernández de Castro

Es decir, si se reelige Bush será malo por conocido y si gana Kerry malo por conocer.

La dura y negativa campaña electoral nos ha permitido observar las fortalezas y debilidades de ambos candidatos.

Las fortalezas

Bush tiene principios religiosos y morales muy fuertes. Su religión le corrigió una vida de excesos, especialmente con el alcohol. Utiliza su instinto para tomar decisiones y ha mostrado una consistencia especial para proseguir con la estrategia adoptada (aun cuando hay cambios en el escenario). Por ejemplo, en sus dos campañas presidenciales ha seleccionado dos o tres temas básicos y tiene una férrea disciplina para no salirse de ellos. En esta última campaña, a pesar de que la inestabilidad creciente en Iraq, ha continuado sosteniendo que él es más apto y fuerte para defender al país. Además, tiene una personalidad carismática, Conecta bien con el hombre común y corriente de Estados Unidos y se proyecta como antielitista, no obstante que proviene de una cuna de la más alta alcurnia estadounidense.

Los demócratas nos engañaron con la verdad. Kerry es una estrella de los debates televisivos y es un cerrador fuerte de campaña. Destaca su capacidad analítica, puede entender a fondo un asunto y revisar todos sus detalles, es capaz de formular propuestas elocuentes e inteligentes y sabe aprovechar los espacios políticos, evitando los riesgos. Logró la candidatura demócrata con base en tres elementos: ir aprendiendo en cada tramo de las primarias, siendo consistente en su mensaje de ser un demócrata del centro ideológico de su partido y finalmente, no cometer errores.

Los defectos

Me temo que en ambos casos, superan a las fortalezas anteriores. Bush no reconoce sus errores, lo que se traduce en incapacidad para corregirlos. Respecto a Iraq, no parece que únicamente sea una estrategia de campaña el decir que el mundo está más seguro sin Saddam Hussein. Lo grave es que Bush cree que a pesar de la inestabilidad en Iraq, el mundo y el Medio Oriente están más seguros. Tiene una visión reduccionista de las cosas: blanco o negro, o como él lo ha expresado "estás conmigo o en mi contra". Es altamente impaciente con las críticas. En el primer debate salió a relucir su falta de costumbre hacia las críticas. No soportaba las críticas de Kerry, pues simplemente mantiene un entorno en que no caben. A él lo asesoran los de adentro de su círculo cercano de trabajo y que han mostrado una gran lealtad. Cuando llegó a la Casa Blanca a principios del...

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