Magia hecha
| Autor | Viridiana Flores |
De repente, al abrir el libro, salta un dinosaurio, parece que en cualquier momento se moverá, pero no, si le das vuelta a la página, desaparece.
Se trata de un libro "pop-up", que su magia se debe a la ingeniería de papel y creatividad de quienes realizan dobleces exactos para formar estrambóticas estructuras y mecanismos.
Y es que de acuerdo al tipo de material con el que está hecho, el papel tiene posibilidades infinitas.
"El 'pop-up' es un libro tridimensional y abarca todos los textos en los que jalas tiras o tienen una ventanita que se abre, es una mezcla con origami. Es muy chistoso porque las personas los buscan por 'los libros que se salen', hay una fascinación tremenda", platica Emma Sofía Madrazo, propietaria y directora de la librería Leelefante.
"El hecho de que tenga otra dimensión lo hace muy atractivo. En algunos casos pueden tener una interacción directa, si hacen tal o cual cosa, pasa tal cosa, además el nivel de impacto es muy fuerte porque hay una sorpresa que supera los límites, los bordes, la altura, ésa es la magia. Ahora con todos los estímulos que hay, pero que salga de un libro, de un pedazo de papel y que tenga movimiento, es como magia", explica Emma.
Estos libros, que según la directora de Leelefante, son editados mayormente en España, y que en ocasiones no dan crédito a la persona que realizó la ingeniería de papel, surgieron en el siglo 14 con temas de astronomía, anatomía y religión.
"El 'pop-up' surge casi desde que se empezó a encuadernar, se les movían algunas piezas, se levantaban partes de los letreros y han ido avanzando; en el siglo 18 fueron muy recurridos para el entretenimiento y educación infantil", comenta Mónica Urrea, gestora cultural y encuadernadora.
Mónica, quién también imparte el taller de Libros Pop Up en la Biblioteca Pública del Estado de Jalisco, Juan José Arreola, menciona que al realizar ejercicios con técnicas básicas de "pop-up" en los que recortan, doblan y pegan para lograr el efecto, los niños razonan y desarrollan su motricidad.
Eso sí, aunque son espectaculares y pueden ser mostrados a pequeños, la recomendación es que sean manipulados por niños mayores de cuatro años, pues al momento de investigar los puede romper, al menos que sea un libro sacrificado para aprender a cuidarlos.
¿Cuáles son los beneficios?
-La mayoría de los libros son planos, pero cuando sale alguna figura tridimensional los niños quedan asombrados y se involucran más al esperar qué va a suceder en la...
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