La magia de una charreada
El coleadero
-Suerte ubicada tercera en el orden, el cual se ejecuta con toros criollos y cebúes.
Conocida como "La tumbacueros" , esta suerte tiene como objetivo tumbar al toro; se realiza desde la manga del lienzo, donde el toro sale del partidero y el charro debe cabalgar junto al animal, tomarlo del rabo y tirarlo.
Esta acción debe cumplir con ciertos requisitos: el primero de ellos es "saludar" al toro, para ello el charro debe tocarse el ala del sombrero; después debe "pachonear", que es darle una palmada al toro en un costado.
"Arcionar", o sea tomarlo de la cola y enroscarla en la pierna derecha. Después debe "estirar", abriendo la cabalgadura hacia el lado izquierdo y así provocar que caiga el toro.
Según la inercia que lleve el astado será la forma en que caerá; cuando el toro da un giro sobre su costado al caer se le llama girar de "redonda".
Al terminar el coleadero se cierra la manga del lienzo e inician las suertes en el ruedo.
La cala de caballo
-Es considerada la suerte más importante de todas, pues en ella se demuestra la buena rienda, educación y la mansedumbre del caballo. Durante la realización de la cala no se instrumenta ningún tipo de música por respeto.
El jinete debe presentar a los jueces el caballo y los arreos que lleva, para que verifiquen que están dentro del Reglamento de Charrería, todo esto se hace en un rectángulo de 20 metros de largo por 6 de ancho.
Una vez que han sido revisados, el jinete lleva a la cabalgadura hasta la manga del lienzo, de donde debe de partir a galope, para que cuando llegue al rectángulo "raye al caballo", es decir, lo frene en seco.
Después, debe de hacer giros completos hacia ambos lados, seguidos de medios giros.
Una vez concluidos, el caballo debe ir reculando (caminando hacia atrás) hasta los 30 metros de distancia, para regresar a su paso natural y finalizar la suerte.
En este ejercicio se califica el buen gobierno sobre el animal, su mansedumbre, andadura, galope, carrera, postura de cabeza y cola del animal.
El pialadero
-Es la segunda suerte en el orden del festejo; el objetivo es detener a la yegua lazándola de las patas traseras.
En la manga del lienzo, sale, a toda carrera, la yegua del partidero, y el charro debe de estar colocado a 4 metros de distancia, al momento de pasar la yegua frente al charro debe lanzar la soga y así detenerla.
Se le conoce como la "mocha dedos" porque uno de los accidentes más comunes que tienen los charros, es la mutilación de los dedos cuando...
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