Madres canguro: Luchan por su recién nacido piel a piel

AutorBertha Wario

Cuando el bebé llega antes de lo previsto, y la báscula registra un peso inferior a los dos kilos, es fácil tener en mente la imagen de unos padres angustiados por ver, durante semanas, cómo concluye el bebé su desarrollo dentro de una incubadora.

Pero, ¿y si la madre lo colocara dentro de su pecho para que recibiera ahí un calor corporal las 24 horas, tal como lo hacen los marsupiales? Hace 23 años, el médico Edgar Rey Sanabria, entonces jefe del servicio de neonatología del Instituto Materno Infantil y profesor de pediatría de la Universidad Nacional de Colombia, respondió a esta pregunta con acciones y creó así la Técnica Madre Canguro.

Su propuesta, que se implementó también con la leche materna como único alimento, alivió el déficit de incubadoras del hospital donde laboraba, que por aquella época atendía hasta 30 mil partos al año, y dio como resultado un crecimiento sostenido en los recién nacidos, como si continuaran en el vientre materno.

Pero ese crecimiento en talla, ganancia paulatina de gramos y aumento en el perímetro cefálico del prematuro no lo es todo. Casi 10 años después, cuando la técnica ya se aplaudía a nivel internacional pero no era reconocida en el medio científico porque no se había demostrado su eficacia, efectividad y seguridad, una serie de estudios dieron a luz descubrimientos sorprendentes.

Hasta entonces se entendió en la cuenta que la Técnica Madre Canguro era algo más que una alternativa para naciones tercermundistas, al grado que en Suecia, uno de los países con números más bajos en morbimortalidad de prematuros, se aplica de rutina. Además, hace un par de semanas, durante el Congreso Mundial de Medicina Perinatal, con sede en Barcelona, se le reconoció como un adelanto no tecnológico para la neonatología.

Natalie Charpak, de visita en Monterrey como ponente del Congreso Interamericano de Pediatría, organizado por el Colegio de Pediatría de Nuevo León, fue una de las investigadoras que coordinó los primeros estudios comparativos que evaluaron las diferencias entre los recién nacidos de bajo peso tratados con el programa y aquellos que habían recibido cuidados tradicionales.

"Yo quiero sacar la idea de que ya no es la alternativa del pobre, es para todos los niños prematuros", señala la especialista de origen francés, titular de la Fundación Canguro de la que depende, desde 1994, un centro de entrenamiento donde han recibido capacitación centenares de equipos multidisciplinarios de 25 países de los cinco...

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