Lucrecia Lozano / Al desnudo

AutorLucrecia Lozano

La política nacional se muestra cada vez más al desnudo. Y no me refiero a la exhibición de los "cuadritos" del abdomen del ex Gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, quien lleva una feliz y próspera vida en Barcelona y parece emular la tendencia que han impuesto algunos artistas de enseñar de forma desinhibida sus cuerpos en fotos que publican en las redes sociales para escándalo de algunos y regocijo de otros.

Me refiero a la conducta y la actuación de nuestros políticos y autoridades.

Soy consciente del riesgo de generalizar refiriéndome a ellos en forma plural. La verdad, uno como ciudadano ya no sabe hacia dónde voltear para encontrar políticos y servidores públicos honestos que consideren y vivan la política como un ejercicio digno y necesario, cuyo fin no sea otro que servir a la sociedad y promover el bien común.

Por desgracia, en nuestro País el ejercicio de la política se ha convertido en sinónimo de triquiñuela, rapiña, cinismo y corrupción. Basta con conocer todos los días las noticias nacionales para descubrir que un alto porcentaje de ellas tiene que ver con actos de corrupción y el uso patrimonial de los recursos públicos por parte de funcionarios de cualquier afiliación partidista.

El caso más reciente de esta práctica es el escándalo de los "diezmos" o "moches" que legisladores federales del PAN -y quién sabe si también de otros partidos- exigen a Presidentes Municipales para autorizarles fondos para sus localidades.

La cosa no queda ahí, pues también se ha denunciado que los honorables legisladores exigen que se trabaje con contratistas amigos que a su vez se benefician de esta red de corrupción en la que muy probablemente están involucrados algunos Ediles.

La idea de que la corrupción pública es una práctica exclusiva del PRI porque fue durante su prolongado dominio cuando ésta se extendió y se enquistó en el aparato estatal y en la sociedad es un gran mito.

La corrupción está presente en todos los partidos políticos y en todos los niveles de gobierno, al igual...

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