Luchan contra adicciones

ANTE LA evidente alza en el consumo de drogas entre la población juvenil, las universidades públicas y privadas de Nuevo León aplican una serie de medidas con las que buscan combatir el uso de estupefacientes por parte de sus alumnos.

Aunque la aplicación de pruebas antidoping a sus alumnos inició como parte de sus programas de salud o proyectos de investigación, éstas se han convertido ya en una herramienta fundamental de las instituciones educativas para disuadir el uso de narcóticos entre la población estudiantil.

Mientras el Tec de Monterrey y la UdeM sancionan hasta con expulsión a los alumnos adictos, la UANL ofrece tratamientos para los estudiantes a quienes se detecte el consumo de algún fármaco ilícito.

El pionero en la utilización de estos exámenes es el Tec, que los aplica en forma aleatoria entre su alumnado desde hace ocho años.

Jorge Lozano, director de Asuntos Estudiantiles del Tec, señaló que las pruebas se aplican de manera general entre los alumnos como un elemento disuasivo.

Como parte de su Programa de Prevención actualmente aplican unas mil 500 pruebas al semestre, lo que representa cerca del 10 por ciento de su población.

Lozano explicó que de acuerdo con el Reglamento General de Alumnos, en caso de negar el consumo de drogas en la encuesta y resultar positivo en la prueba de orina o negarse a esta evaluación, los jóvenes son remitidos a una junta disciplinaria e, incluso, pueden ser expulsados.

Quienes reconocen ingerir sustancias ilícitas entran en una red de apoyo, donde reciben asesoría y consejería por parte de psicólogos y especialistas, y son remitidos a centros de integración juvenil para someterse a un programa de rehabilitación.

METRO publicó el 5 de abril que, de acuerdo con fuentes militares, en Nuevo León hay 200 mil adictos, quienes consumen en promedio dos dosis al día.

En la Universidad de Monterrey, Alicia Cantón, directora de Comunidad Universitaria, dijo que el antidoping se aplica desde el otoño del 2008 como parte de la Evaluación General de Salud, incluida en el "Programa Comunidad Estudiantil Saludable".

Aunque no precisó el número de pruebas aplicadas, Cantón aseguró que el tamaño de la muestra es representativo de la población y que se aplican dos veces al año por sorteo.

De acuerdo con el Reglamento sobre la Prevención de la Salud de la UdeM, si el alumno reconoce consumir drogas, sale positivo en el antidoping o se niega a someterse a éste, se considera una infracción para la salud y es...

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