'Le llueve' al campo

AutorLudivina Ruiz

A casi tres años de que la sequía comenzara a presentarse en Nuevo León, las afectaciones por las altas temperaturas y la falta de agua se ven reflejadas en todos los actores de su sector primario, desde la disminución del hato ganadero, pasando por una menor producción agrícola y hasta el encarecimiento de los alimentos para el consumidor final.

Y es que la falta de agua no dio las condiciones propicias para que los productores sembraran, en el mejor de los casos, pues los que sí lo han hecho resultaron con cosechas muy bajas o incluso pérdidas, coinciden agricultores del Estado.

En el sector pecuario, la falta de zacates para alimentar ganado, y el encarecimiento de los ingredientes disponibles para la formulación de raciones (como el sorgo, trigo y soya), fueron elevando los costos de producción de la carne, pegándole a los bolsillos de los consumidores.

Hay menos de todo

De acuerdo con datos oficiales de la Sagarpa, las afectaciones que han dejado las malas condiciones climáticas en Nuevo León han sido drásticas, reflejándose tanto en rendimientos más bajos, menor producción y menos superficies sembradas por los agricultores.

Estadísticas de la dependencia federal señalan que, por ejemplo, en los últimos tres años, entre el 2009 y el 2010, en el Estado se redujo la cantidad de hectáreas sembradas de cultivos como frijol (14.5 por ciento), maíz forrajero (28.3 por ciento) y tomate (21 por ciento).

También se siembra menos trigo en grano (27.8 por ciento) y tomate verde (24.5 por ciento), detallan los datos.

Esto trajo consigo una menor producción en toneladas, un ejemplo de ello es el trigo.

De cosecharse en el 2009 unas 54 mil 322 toneladas de trigo en Nuevo León, al cierre del 2012 el resultado fue de 39 mil 401 toneladas, un 27.4 por ciento menos.

El rendimiento de las producciones es otro factor que ha sido afectado por la falta de lluvia.

En cultivos como el maíz en grano, el rendimiento bajó de 3 toneladas por hectárea en el 2009 a 2 toneladas al cierre de diciembre del año pasado.

Muertes y encarecimiento

En el sector pecuario las afectaciones se han dado más allá de la muerte de los animales por falta de alimento y agua, llegando al encarecimiento del becerro para engorda y hasta el desabasto de éste, impactando los costos de producción de la carne.

Eladio González, presidente de la Asociación de Engordadores de Ganado Bovino del Noreste, señala que para este sector la pérdida de ganado impactó directamente en el abasto del...

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