'Todos lloramos de tristeza...'
| Autor | D. Sosa |
Martes 10 de octubre
7:15 am. Suena el teléfono, me llama mi hermana histérica diciéndome que pase por ella para ir a Banamex, pues leyó en "REFORMA" que las cajas de seguridad habían sido saqueadas.
Le dije que se relajara, que nosotras no habíamos sido afectadas, porque si no ya nos hubieran llamado del banco. Con toda calma me vestí, mandé a los niños a la escuela y fui por ella.
Llegamos a la sucursal a las 9:30 am, vimos mucha gente nerviosa tratando de entrar. Desde ese momento todo fue caótico.
El director del banco estaba parado con una lista, y a cada uno nos iban llamando. Llegó el turno a mi hermana y le dijeron que su caja se había salvado, luego me tocó a mí: "Su caja sí fue afectada"... ¿afectada?, ¿qué significa eso? Me respondieron que no sabían con exactitud y que había que esperar.
¿Cómo le íbamos a decir a nuestros padres que todo lo recolectado de toda su vida, joyas, recuerdos de los abuelos, dinero y objetos de valor sentimental ya no estaban?
Pasaban las horas y no nos daban información. Más gente seguía llegando y se repetía una y otra vez la escena, clientes frustrados, gritando, llorando...
Preguntábamos qué hacer, y la única respuesta fue: váyanse a su casa y nosotros les llamamos. Decidimos quedarnos. Por la tarde teníamos hambre y estábamos nerviosos, dentro de la sucursal empezaron a pasar botellas de agua, la gente fumaba y hablaba por teléfono hasta que llegó la noche y nos fuimos a descansar.
Miércoles 11
Llegamos a las 9:00 am a la sucursal, los afectados seguían llegando. Tomamos un número de atención y nos pidieron hacer una lista de lo que recordábamos que estaba dentro de la caja, para después pasar con un notario.
Mi hermana y yo habíamos pedido permiso para faltar al trabajo, la caja estaba a mi nombre y de mi madre, que todavía no le habíamos contado lo ocurrido. Ella es quien sabe con exactitud lo que contenía la caja, pues durante toda la vida fue comprando con mucho esfuerzo sus joyas, guardando recuerdos de los abuelos, monedas antiguas, centenarios... eran sus cosas de toda una vida, 45 años de matrimonio que ahora son irrecuperables.
Jueves 12
Pasamos con el notario y describí lo que me acordaba, me costó trabajo que me dejaran poner que mi madre como titular es la que sabía con exactitud el contenido y que ella ampliará la declaración.
Nos formamos para bajar uno por uno a la bóveda... era impresionante ver tanto desorden, un bloque de cajas de acero movido y un hoyo en la pared... eso...
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