Llega el Papa a la antesala

GUATEMALA.- El Papa Juan Pablo II arribó ayer por la tarde a Guatemala, media hora antes de lo previsto, lo que no evitó que miles de fieles lo recibieran en las calles de la ciudad con globos, pancartas y banderitas con los colores papales distribuidas por una radiodifusora local y que siguieran cada uno de sus movimientos.

Como si de las campanadas que preceden al año nuevo se tratara, así los chapines, como se autodenominan los guatemaltecos, siguieron uno a uno los 21 cañonazos con los que fue recibido el Pontífice y aplaudieron cuando éstos terminaron.

Tras la espera, finalmente llegó el momento que esperaron desde febrero pasado cuando se anunció la visita de Juan Pablo II a Guatemala y el Papamóvil logró verse en medio de la multitud.

Cientos de pétalos de rosa cayeron entonces sobre el auto papal en el que decidió también pasear una paloma. Los gritos de "Juan Pablo II, te quiere todo el mundo", tan familiares en México, se escucharon también en esta tierra.

Pero el momento sólo duró unos instantes, en donde el Papa por el cansancio apenas logró alzar la mano en señal de saludo.

"No me importa que no me haya visto, es admirable que a su edad pueda todavía venir acá, eso es un ejemplo para nosotros. Ojalá que el Papa pueda ayudarle a Guatemala a terminar con la violencia y a darnos paz", apuntó Mario...

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