La otra llama de Paz
| Autor | Yanireth Israde |
Libre de confinamientos, la curiosidad del poeta Octavio Paz indagó la primigenia explosión del universo -el Big Bang, o el gran pum, como le llamaba el escritor- y otras gestaciones, la del cerebro humano, por ejemplo.
La avidez del escritor por lo científico ha sido reconocida por investigadores como el estadounidense Gerald Edelman, Nobel de Medicina, y por el mexicano Enrique Soto, responsable del Laboratorio de Neurofisiología Sensorial de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quien es autor de un ensayo que reflexiona sobre los aportes neurofisiológicos de Paz en La llama doble. Amor y erotismo.
Por su parte, el escritor Carlos Chimal, quien escribió Luz interior. Conversaciones sobre ciencia y literatura, destaca la compresión del Nobel de Literatura mexicano de los temas científicos, tan rápida como profunda.
"Paz leía de ciencia, estaba al tanto: sabía", afirma la escritora Elena Poniatowska, cuyo esposo, el astrónomo Guillermo Haro, fue uno de los científicos que promovieron el ingreso del poeta a El Colegio Nacional, institución que hoy, a las 19:00 horas, lo recordará en su 20 aniversario luctuoso.
Los escritores, en cambio, manifestaron en su momento reticencias para aceptarlo en el organismo, revela Ángel Gilberto Adame, autor de la biografía Octavio Paz. El misterio de la vocación.
En un artículo publicado en 2015 en la revista Letras Libres, recoge el testimonio de Fernando Benítez: "No fueron los 'escritores' de El Colegio -hubo alguna honrosa excepción- los que impusieron su candidatura, sino los hombres de ciencias".
Poniatowska conserva la carta que Paz dirigió a Haro. Solicitaba al astrónomo respondiera su discurso de ingreso en lugar de Jaime Torres Bodet, al que correspondía la réplica como presidente en turno de El Colegio.
"Creo que (lo rechazó) porque le parecía más oficial; Torres Bodet había tenido muchos puestos dentro del Gobierno", relata la autora del libro Octavio Paz. Las palabras del árbol.
Finalmente, el 1 de agosto de 1967, el escritor Antonio Castro Leal contestó el discurso de Paz, titulado La nueva analogía.
"Fue, sobre todo, un hombre moderno, un hombre de su tiempo, a diferencia de muchos literatos o historiadores que se mantienen alejados y temerosos de la tecnología y la ciencia, con una visión que yo calificaría de premoderna", apunta Soto.
"Detecto en él una propuesta, una cosmovisión y una manera de pensar que incluye al pensamiento científico moderno, y el más moderno que había...
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