La leyenda continúa
| Autor | Marco Castillo |
Luchó contra monstruos, zombies, momias... y los venció. Marcianos invadieron la Tierra y los hizo huir. Ni siquiera la extraordinaria belleza de "Tundra" y "Zorina", las diabólicas mujeres vampiro con cuerpos de Ofelia Montesco y Lorena Velázquez, respectivamente, pudieron con él. Fue un infarto el que acabó con el héroe más grande del cine mexicano.
Hoy, hace 20 años murió El Santo, el Enmascarado de Plata. Gozaba de excelente condición física cuando todavía trabajaba en un espectáculo en el Teatro Blanquita, pero la muerte tocó a su puerta y a ésta, a diferencia de sus mortales enemigos del cine, no logró derrotarla.
"Se fue en el momento justo pues gozaba de todas sus facultades físicas y mentales. El le tenía miedo a la vejez y no le hubiera gustado llegar a ser un anciano. Dios se lo llevó entero, sin que diera lástima y, por el contrario, se mantenía muy activo", recuerda el Hijo del Santo, quien lleva con orgullo la máscara que heredó del máximo héroe de carne y hueso del cine mexicano y que murió a consecuencia de un infarto.
Rodolfo Guzmán Huerta, nombre verdadero del encapuchado, es motivo de nutridos homenajes. Y ahora, su heredero prepara otros dos más con los que pretende rendir un poco de honor a quien le dio la vida, al hombre que deleitó con sus fantásticas aventuras y que abrió las puertas al cine mexicano en países como Suecia, Holanda, España, Francia e Inglaterra, en donde ahora El Santo es ídolo de culto.
"Uy, no sabes lo que la gente paga por ver una película de él. Cobran hasta 200 dólares en esos cines de arte para todos los admiradores que quieren ver una de sus cintas", asegura Lorena Velázquez, coprotagonista en cinco de las cintas más populares del ídolo de Tulancingo.
Sus películas abrieron nuevos mercados, hicieron taquilla, ganó adeptos de varias partes del mundo, sobre todo en Europa, pero en su tiempo, sus películas eran calificadas de lo peor, como recuerda su hijo.
"Cuando él vivía, sus películas no eran bajadas de churros, pero ahora es cine de culto y eso me enorgullece, por eso siempre trato de hacer algo por él", dice el hijo del gladiador, quien anoche estaría presente en la ceremonia de apertura de un cine en el Estado de México que llevará el nombre de su padre.
Ver al Santo parado sobre una piedra extendiendo sus brazos, formando la señal de la cruz para espantar a la hechicera Mayra y a sus esbirros del averno (comandados también por la Velázquez) en Atacan las Brujas (1964), no es precisamente...
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