El Lecumberri de Jalisco

AutorAlejandra Carrillo

"Viéndolo por fuera nos daba la impresión de que era un castillo medieval", recuerda Antonio Michel Orozco, sobreviviente de la Penal de Oblatos, escritor y militante de la Liga Comunista 23 de septiembre.

El recientemente galardonado con el Premio Carlos Montemayor, -que recibió el pasado 11 de septiembre en el Complejo Cultural Los Pinos de la Ciudad de México-, recuerda claramente los días oscuros que vivió allí con sus compañeros durante varios años.

"Conocimos su interior cuando los primeros presos del movimiento estudiantil entraron a la penal, conocimos lo que le llamaban al área de visitas familiar, el pueblito, porque había un cine, lugares para sentarse y para comer, esa fue la primera impresión cuando íbamos a visitar a Enrique Pérez Mora, el 'Tenebras' en el 70", explica Michel.

Todo fue diferente cuando en 1973, como miembros de la guerrilla, él y varios de sus compañeros cayeron en la Penal.

Construida en 1932, la Penal de Oblatos se ubicaba en lo que entonces era la periferia de Guadalajara para sustituir la antigua cárcel de Escobedo, en su momento el único centro penitenciario de la Ciudad.

Hoy, en conmemoración del 50 aniversario de la Liga Comunista 23 de Septiembre, se proyectará en la ex Penal el documental "Oblatos. El vuelo que surcó la noche", que relata los hechos acontecidos durante la fuga. La presentarán los sobrevivientes de aquel día.

Los muros de la de Oblatos de hecho fueron construidos con las piedras de esa primera cárcel. Esas piedras aún se conservan, aunque sin orden, en lo que hoy es un parque recreativo en medio de Oblatos.

Pero ese espacio protagonizó uno de los eventos más escandalosos dentro del clima de tensión de 1970 entre los grupos estudiantiles y el Estado.

El 22 de enero de 1976 seis presos militantes de la Liga Comunista 23 de septiembre, detenidos por actividades subversivas, se fugaron de la penal desafiando a las autoridades y provocando un fuerte operativo en uno de los momentos más álgidos de la Guerra Sucia, -termino acuñado en referencia a la represión que ejerció el Estado Mexicano sobre algunos grupos u organizaciones de oposición-.

Uno de esos presos fue Antonio, quien detalla lo ocurrido en su libro La Fuga de Oblatos, editado por Casa del Mago en 2009.

"Había policías de la DFS (Dirección Federal de Seguridad, ahora extinta. Se convirtió en 1989 en la CISEN) que decidían qué se nos permitía tener ahí, en términos de lecturas o de visitas, de objetos personales o herramientas para...

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