Lamenta Brian Asawa falta de oportunidades

AutorMaría Eugenia Sevilla

El auge de los contratenores ha resultado para estos artistas un "arma de doble filo", pues si bien el gusto por la música antigua y la ópera barroca ha resurgido en el público desde la segunda mitad del siglo 20, aún no hay suficientes obras programadas para mantener en escena al creciente número de exponentes de este peculiar registro vocal.

En rueda de prensa, el contratenor estadounidense Brian Asawa lamentó con esta reflexión la falta de oportunidades para intérpretes como él, quienes han desarrollado la tesitura por elección -a diferencia de los demás cantantes cuyo registro obedece a su naturaleza, los contratenores son producto de un entrenamiento técnico.

"Hay más contratenores de calidad hoy que cuando comencé, hay mayor competencia porque las oportunidades de trabajo son las mismas".

"Si una soprano gusta en una temporada, es posible que la llamen para la siguiente, porque hay muchas obras que puede cantar, en cambio, un contratenor deberá esperar a que programen algo que pueda cantar".

Quien en 1994 ganara en México el Concurso Internacional Operalia, patrocinado por el tenor Plácido Domingo, visita México por segunda ocasión para ofrecer un recital en el que no sólo incluirá repertorio escrito para su tipo de voz, sino también obras de Giuseppe Verdi, Franz Schubert y Heitor Villa-Lobos.

Será este jueves a las 20:30 horas, en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario, donde el artista ofrezca un único recital acompañado por el pianista Charles Worth, a invitación de la Dirección Nacional de Música de la UNAM.

"Lo que me importa es que la gente sepa que la voz del contratenor no es sólo apta para cantar Monteverdi, Handel o Cavalli, sino también es adecuada para otros grandes autores de la música. Tengo un tipo de voz que me permite explorarlos.

"Para las canciones de Verdi quizá uno pueda preferir una voz más gruesa, pero tengo la fortuna de que mi voz corre bien por encima de la orquesta".

Asawa se describió como poseedor de un falseto de fuerte volumen, a diferencia del común de los contratenores que, dijo, suelen tener voces pequeñas, más adecuadas para el repertorio camerístico.

"Cantar obras románticas no supone ninguna...

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