Lado B / Inicios y principios
| Autor | Marco Granados |
Con el inicio de año reactivamos las actividades cotidianas de todos y con ellas nuestros estreses y nuestros naturales propósitos de año nuevo. En medio de los temas vigentes más bien relacionados con aspectos como la inseguridad y la aplicación de recursos, no es posible -tristemente- desvincularlos del ejercicio político; en lo doméstico los focos rojos siguen estando en la salud presupuestal, y en lo físico en esos kilos llegados con las fiestas de fin de año.
En lo cultural, las cosas se reaniman poco a poco y nuestros heroicos espacios culturales ya están en funciones, todos mantienen sus espacios ocupados con los proyectos que les ayudaron a terminar el 2006 y algunos, los menos, ya están preparando el inicio de actividades con nuevos bríos y proyectos. Después del compendio de la entrega anterior y para ser más justo, debo decir que en el año que recién se fue hubo muchas más cosas de las ya reseñadas y que, sin ir más lejos, el año finalizó con una buena dotación de exposiciones que acá reviso.
Empiezo por la Bienal Nacional Monterrey 2006, mejor conocida como "Artemergente", los dos aspectos principales del evento son, primero, que es la herencia de algo llamado Bienal Regional de la Plástica Joven, efectuada desde principios de los 90 en la Casa de la Cultura, recinto que la sigue acogiendo ahora en su nuevo nombre. Y el segundo aspecto es el que tiene que ver con que sólo fue cuestión de abrir la convocatoria más allá de los límites territoriales de la región noreste para que la hegemonía en la obtención de los premios se le acabara a Monterrey.
Lamento decir que se los había dicho, pero así es. La bienal anterior había cumplido su ciclo y era cosa de dinamizarla de otra forma para que hubiera cambios radicales. Ahora bien, lamento decir que este nuevo formato de bienal no ofrece nada nuevo y, por el contrario, nace viejo y desgastado, con todos los vicios y lastres que tienen este tipo de eventos y, por si esto fuera poco, con una extraña representatividad y una compleja declaración de principios que son los resultados de ésta su primera edición. Vale la pena darse la vuelta e intentar entender por qué en un evento de este tipo es la pintura la que se lleva la mayor parte del pastel.
Por otro lado, en la Fototeca del Centro de las Artes se exhibe "Eugenio Espino Barros: Fotógrafo Moderno" que, contrario a lo débil que resulta el título de la muestra y la museografía, no es lo mismo en cuanto a contenido...
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