Kimmy Schmidt muestra que Nietzsche tenía razón
Luis Javier PlataCIUDAD DE MÉXICO, marzo 22 (EL UNIVERSAL).- Pasar 15 años encerrada en un búnker tras ser secuestrada por un reverendo apocalíptico y creyendo todo ese tiempo que el resto del mundo finalmente había logrado su propia versión bíblica de Juan 13:34-35 ?transmutándola en un "exterminaos los unos a los otros"?, tiene que dejar, forzosamente, secuelas en la víctima de este infortunio.
No sería raro imaginar, ante una situación así, a una sobreviviente abatida física y mentalmente, sin ánimo alguno de intentar incorporarse de nuevo a la vida en sociedad que por década y media se le escamoteó. En vez de ello, la actriz y comediante Tina Fey y el productor Robert Carlock lo que crearon fue al personaje de Kimmy Schmidt.
Kimmy Schmidt es la versión millennial y optimista del súperhombre ?súpermujer, en este caso? nietzscheano (mal) condensado en la frase: "Lo que no te mata te fortalece" (aunque, en rigor, Nietzsche escribió: "Lo que no te mata te hiere de gravedad y te deja tan apaleado que luego aceptas cualquier maltrato y te dices a ti mismo que eso te fortalece").
Kimmy Schmidt es un ejemplo de libro de texto de resiliencia y psicología positiva, una ficción que alecciona a sus seguidores reales sobre la capacidad que tenemos de sobreponernos a situaciones traumáticas. Pero, ¿qué tanto se aproxima esta visión de comedia a lo que experimentaría fuera de la pantalla una Kimmy Schmidt tangible, de carne y hueso?
Consecuencias del encierro. Frances Tennant, estudiante de la Universidad de Leicester, publicó un artículo en el que diagnostica los posibles padecimientos que Kimmy Schmidt tendría que exhibir como consecuencia de las condiciones de encierro en el refugio subterráneo.
El primer efecto del encierro prolongado de Kimmy es la pérdida de masa muscular debida a la falta de actividad física apropiada, pues en un lugar tan pequeño sus movimientos estuvieron bastante limitados, aunque en algunos episodios podemos observar cómo ella y sus acompañantes de clausura ejercitaban al menos algunos músculos de las extremidades superiores al dar vuelta a una "manivela misteriosa" (durante su confinamiento, y mucho tiempo después, no se dieron cuenta de que al girar esta pieza generaban electricidad para el cuarto del reverendo).
Como no hay evidencia de que Kimmy Schmidt siguiera un programa de ejercicios integral que, considerando su confinamiento, le permitiera ejercitar la mayor parte de sus restantes músculos, es posible que tuviera...
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