Karen Batres/ Echenle un ojo
| Autor | Karen Batres |
Nuestra ciudad recibe a decenas de estadounidenses en busca de cirugías más baratas o procedimientos prohibidos en su país nativo, en lo que constituye un secreto a voces. La cirugía con rayo láser para corregir defectos de la visión se ha vuelto una mercancía de promoción en Monterrey, y los regios no se quedan atrás en acudir a este milagro de la tecnología.
La aparente simplicidad del procedimiento para corregir la defectuosa visión distante solapa la gravedad de las complicaciones potenciales y la necesaria rigurosidad de selección de pacientes idóneos.
Es muy difícil determinar con exactitud los índices de complicaciones debido a una definición variable del término "complicación". La compañía que fabrica LASIK (el equipo utilizado para la cirugía) y la Academia Americana de Oftamología calculan una tasa de complicación que va desde el 1 por ciento hasta el 8 por ciento de los pacientes operados, pero estas cifras tienden a incluir a las personas que sufren algún grado de pérdida de visión. Ronald Link, fundador del sitio cibernético SurgicalEyes.com, asevera que en realidad el número de pacientes es bastante mayor.
Las complicaciones incluyen cicatrización de la córnea, pobre visión nocturna, ojos secos, visión doble o borrosa, y en algunos casos la ceguera. Algunas complicaciones son tan graves, que requieren trasplante de córnea para salvar la visión.
Aun los pacientes satisfechos con el procedimiento pueden descubrir que en unos años su visión empeora, y se requiere otra cirugía.
El procedimiento utiliza un rayo láser para vaporizar una parte de la córnea y moldearla para ajustar la capacidad del ojo para enfocar objetos. Es evidente que no estamos hablando de algo inocuo, aunque se promueve como si fuera una limpieza dental o una visita al salón de belleza.
Mi interés en el tema surgió al escuchar de varias personas el relato de sus problemas postquirúrgicos, incluyendo a una persona que sufrió la cicatrización de una córnea mal operada.
La revista BusinessWeek de 20 mayo de 2002, de donde tomo estos datos, menciona varias medidas de precaución esenciales para cualquiera que contemple operarse las córneas con rayo láser.
La primera es localizar a un cirujano con amplia experiencia. Aunque esto es fácil en Estados Unidos porque existen muchas fuentes fidedignas de información, no lo es tanto en México; el cirujano necesita haber practicado el procedimiento cuando menos unas 200 veces. Después de tal número de cirugías, la tasa de...
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