Entre joyas y balas (I)
| Autor | METRO / STAFF |
En un entorno violento, de traiciones y opulencia, entre joyas y balas, Sandra Ávila Beltrán se erigió para formar parte de la historia del narcotráfico en México.
Nació en Baja California, el 11 de octubre de 1960 y su árbol genealógico está plagado de personajes marcados por el trasiego de drogas y el control de las plazas.
Según reportes de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la DEA, entre las ramificaciones de la familia están los hermanos Arturo y Roberto Beltrán Félix, tíos de "La Reina del Pacífico", como es conocida popularmente.
En archivos policiales se establece que al menos cuatro de los 12 hermanos Beltrán Félix aparecen en expedientes de narcotráfico en ambos lados de la frontera: Roberto, Arturo, Miguel Angel y María Luisa, madre de Sandra.
Además, sostiene la documentación citada por Grupo REFORMA en 2003, se mencionaba a los tíos de Ávila Beltrán como primos de Miguel Ángel Félix Gallardo, líder del gran imperio de drogas que operó a plenitud en los años 80.
No obstante, en su libro "La Reina del Pacífico: es la hora de contar", Julio Scherer recoge la voz de una mujer que admite haber crecido en un entorno marcado por las drogas, pero niega vínculos de sangre con "El Jefe de Jefes" y otros capos.
Los primeros años de su vida, relata Ávila Beltrán al periodista, los vivió entre Tijuana, Culiacán y Guadalajara, describiendo parte de las costumbres de la sociedad, sobre todo del norte del País.
Habla de fiestas y de bailes, de peleas y de la costumbre de solucionar los conflictos a balazos.
Sandra Ávila Beltrán es la tercera de siete hijos que tuvieron Alfonso Ávila Quintero y María Luisa Beltrán Félix.
Ante el fundador de la revista Proceso, "La Reina del Pacífico" cuenta que en la Perla Tapatía se matriculó en una universidad privada para estudiar Ciencias de la Comunicación, pero no terminó la carrera.
Según archivos periodísticos, el 25 de abril de 1986 se convirtió en la esposa de José Luis Fuentes Jiménez, comandante de la Policía Judicial Federal en Baja California, a quien se le señalaba por tener tratos con narcotraficantes.
Entre las ligas que éste sostenía estaba la de Ignacio "Nacho" Coronel Villarreal, quien comenzó su carrera en el mundo del narco como "madrina" del comandante.
Con Fuentes Jiménez, "La Reina del Pacífico" tuvo en 1987 a su único hijo, a quien bautizaron también como José Luis, pero su dinámica familiar no duró mucho, ya que su esposo fue asesinado aproximadamente un año y medio...
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