Nosotros los jotos / ¿Quieres ver lo que hacemos?

AutorAntonio Bertrán

-Muy bien. Ahora, ¿puede ver las letras del renglón ocho?

-Sí: D E F P O T E C.

-Perfecto. ¿Y las ve más claras con este lente que es uno... o con este otro que es dos?

-Con el dos, definitivamente.

-Listo. Realmente su graduación ha variado muy poco.

-Me alegra porque vivo de mis ojazos color agua estancada, jaja. Pero háblame de tú, no?, que estoy miope y astigmático pero no soy tan viejo.

-Perdón, es la costumbre. ¿Lees mucho? ¿A qué te dedicas?

-Soy periodisto, tengo una columna gay en el diario METRO, y sí leo mucho, por obligación y por gusto. Además hago fotos, más por morboso que por otra cosa. Y ya que estamos en confianza, sobre todo soy mironcito. ¿De casualidad tendrás micas con rayos X?

-Jaja, no, pero con esta nueva graduación te aseguro que verás más de la cuenta...

Iván se llamaba el optometrista que me hizo unos nuevos anteojos. Yo quería que el examen no se acabara nunca porque estaba encantado contemplando al treintañero moreno, de barba oscura y bien recortada, que tenía unos ojos verde esmeralda dignos de venerarlos como reliquias de santo. Pero todo se termina y resignado tuve que estrechar la mano mullida de vellitos oscuros que me ofreció Iván mientras repetía que en una semana podía regresar por los lentes.

El día que fui a recogerlos, no tuve el mismo gozo de verlo, y ya me había olvidado de este encantador muchacho cuando la semana pasada revisaba mis solicitudes de amistad en Facebook ¡y me encontré con su nombre y hermosa carita! Claro que los ojos se me pusieron como platos soperos colmados de pozole.

A los pocos minutos de haberlo aceptado, Iván me contactó por inbox y empezamos a conversar sobre mis nuevos espejuelos que, como él me aseguró, me permiten ver hasta lo que no. Iván aparece en su foto de perfil junto a un guapo rubio que resultó ser su novio. Seguimos platicando sobre el órgano del ojo ciego y otros gracejos, y en un momento su respuesta se dilató varios minutos.

-Perdona, es que estaba en otra ventana, de cochino.

-¿Mandando nudes o fotos cachondas?

-Jaja, algo así.

-¿Entonces, Iván, con tu novio la cosa es abierta?

-No es abierta, pero es como mi guilty pleasure (placer culpable), jalármela por cam.

-¡Fuertes confesiones! ¿Entonces te la estabas jalando mientras otro te veía por la cámara de la compu y al mismo tiempo me escribías?

-Jaja. Sip, perdón.

-Nada que perdonar. ¿Ya terminaste y te lavaste las manos?

-Sí, y obvio no me lavé las manos.

-¡Qué rico, sigue tecleando entonces!

Como buen...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR