Josefina Leroux / Que renuncie...
| Autor | Josefina Leroux |
Fanáticos de las profecías de Nostradamus o de San Malaquías aseguran que el Papa número 266, un Papa negro, será el último antes del Apocalipsis.
Coincidentemente, Francisco es el Pontífice número 266 y se le distingue como el "Papa negro", ya que dentro de la Compañía de Jesús -la orden religiosa donde se formó el Pontífice- al más alto rango se le nombra General de la Compañía de Jesús, pero también el "Papa negro", debido a su sotana negra y a su jerarquía.
Pertenecer a una orden dentro del catolicismo que ha sido reconocida por apoyar movimientos sociales a lo largo de la historia es otro motivo por el que Francisco no es bien visto por el ala conservadora de la Iglesia Católica Romana.
Pero no es todo. Francisco es un Papa humilde que se ha diferenciado por su renuncia a los privilegios de los Pontífices anteriores, cimbrando el statu quo.
Sus opositores no divulgan que su rechazo es por sus antecedentes pastorales, su humildad o la defensa de los excluidos. Se le acusa de encubrimiento de abuso sexual.
"La Iglesia", que cuenta con un poco más de 400 mil sacerdotes, ha recibido 3 mil denuncias de sacerdotes y religiosos que abusaron de menores en los últimos 60 años (Nexos, 2010).
¿Quién de los sumos Pontífices ha llevado a alguno de los curas pederastas a tribunales? Benedicto XVI no pudo tapar los abusos de Marcial Maciel, no obstante, nunca reconoció sus delitos, sólo lo mandó a retiro para orar...
Los Papas, junto con los Obispos y Cardenales, se han hecho cómplices por décadas para proteger el prestigio de la institución sin importarles el daño perpetrado por sus "príncipes" a los más vulnerables.
Ha sido Francisco el que más abiertamente ha tocado el tema, pero ahora se le acusa y se pide públicamente su renuncia por el supuesto encubrimiento del Cardenal Theodore McCarrick, quien renunció en julio como Arzobispo de Washington y el propio Papa ordenó su arresto domiciliario en espera de juicio canónico.
El Papa ha confesado no haber actuado a tiempo, reconociendo la magnitud y gravedad de los delitos, y ha declarado que la Iglesia ha descuidado y abandonado a los pequeños.
"No puedo dejar de reconocer el grave escándalo causado en Irlanda por los abusos a menores por parte de miembros de la Iglesia", pero, a diferencia de otros jerarcas, admite al menos y pide que se denuncie esta pederastia y sea juzgada.
No sólo eso, ayer mismo convocó a los presidentes de las Conferencias Episcopales de todo el mundo para hablar de la...
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