José Núñez Castañeda / Amor dinero y cuidado

AutorJosé Núñez Castañeda

Un viejo refrán repite que "amor, dinero y cuidado, nunca puede ser disimulado". Cuando una persona tiene un sueldo de 50 ó 70 mil pesos mensuales compra de contado una casa de tres o cuatro millones de pesos y adquiere tres o cuatro automóviles de marcas caras, a leguas nos está gritando que tiene dinero y que el monto de su fortuna va más allá del sueldo percibido. No es necesario emprender una sesuda investigación para poder concluir la existencia de un gato encerrado.

Cuando varias personas, situadas en las mismas condiciones, sin ser ricos herederos o beneficiados de alguna lotería, ostentan su fortuna dudosa sin ningún recato, están diciendo que hay un gran margen de impunidad y están seguros de que nunca recibirán el duro golpe de la ley. Cuando de pronto se abre la caja de Pandora y salta el muñeco escondido, en la prensa aparecen las fotografías de las casas, de los automóviles y de los otros bienes. Entonces surge entre la gente una inocente pregunta: ¿Acaso ninguno de sus jefes había notado ese amor, ese dinero o ese cuidado?

Da pena expresarlo, pero esto es lo que está ocurriendo en nuestro País y ojalá sea un primer paso en una línea de sano comportamiento cívico para devolver a las instituciones esa credibilidad perdida y que se manifiesta en las decenas y en las miles de personas que prefieren no presentar denuncia cuando son víctimas de un hecho delictivo.

Ha quedado abierta una rica línea de investigación, que se reduce a ver el nivel de vida aparente de una persona para poder sacar consecuencias, no solamente de índole fiscal para fincarle...

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