Jorge Volpi / El desdén

AutorJorge Volpi

A ninguno de los cinco parece importarle. Peor aún: podría pensarse que la justicia les tiene sin cuidado. Que sólo están preocupados por la victoria o por atacar a sus rivales de las maneras más ruines, o que sólo están obsesionados con sus propias ideas, sin abrir un mínimo espacio para la duda o el diálogo. En este punto, los cinco se asimilan, los cinco se revelan como parte de nuestra agónica y ciega clase política, de ese sector en el poder que en realidad no se preocupa por los ciudadanos. Si para algo sirvió el debate fue más para mostrarnos lo que los cinco candidatos a la Presidencia no dijeron. Su silencio fue elocuente.

Ninguno -ninguno- incluyó como mensaje central de su agenda o de su discurso el Estado de Derecho y la necesidad de contar con un sistema de justicia independiente, transparente y confiable. Ninguno se refirió a la necesaria implementación del sistema oral acusatorio (porque quizás ninguno sepa lo que es). Ninguno asentó, como parte medular de su estrategia contra la violencia, la corrupción y la impunidad -los temas centrales del primer debate-, la urgencia de reformar el desastroso estado de nuestro sistema de justicia. Este silencio doloroso, este silencio obsceno, es prueba de que, o bien no conocen el país que aspiran a gobernar, o desdeñan uno de los problemas cruciales para enderezar su rumbo.

De forma vaga, torpe, la mayoría reconoció la necesidad de una fiscalía anticorrupción cuyo titular no fuese nombrado por el Presidente, pero ninguno se atrevió a proponer con claridad que sus facultades de investigación y acción fuesen en verdad amplias, al margen de las intromisiones de cualquier gobierno. Alguno se pronunció a favor de la independencia del Ministerio Público, sin precisión alguna, casi de pasada, sin reparar en sus implicaciones. Fueron los moderadores quienes se refirieron a los 200 mil muertos ligados a la violencia, y ninguno de los candidatos -ninguno- pareció escandalizarse con esta cifra o exigió justicia para las víctimas.

Los candidatos del PRI, el Frente y los dos independientes se concentraron en atacar la corrupción del puntero -el cínico señalamiento que solo mira la paja en el ojo ajeno-, repitiendo las mismas mentiras de siempre. Entretanto López...

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