Jorge Salcedo Padilla Jr./ Traición

AutorJorge Salcedo Padilla Jr.

Hoy que se acercan las elecciones intermedias, en las que se elegirán Diputados para el Congreso federal, es prudente hacer un acto de profunda reflexión, a fin promover entre la ciudadanía un ejercicio responsable, que resulte en una elección inteligente que finalmente siente las bases para facilitar la adopción de las políticas que conduzcan a México al progreso que tantos anhelamos.

Hoy por hoy, todos hemos comprobado, muy dolorosamente, por cierto, el resultado de haber dividido el poder, eligiendo para ocupar el Poder Ejecutivo a alguien de diferente partido de los que elegimos para controlar ambas Cámaras. La esterilidad registrada durante los casi dos años de Gobierno del señor Fox y de la presente Legislatura, han revelado, sin lugar a dudas, que nuestra clase política ¡no estaba madura para la democracia! Es fecha en que todavía no contamos en México con un proyecto de nación. Aun en el ámbito de la seguridad pública, que es, con mucho, la principal preocupación de la ciudadanía, se carece de un plan a seguir. Todos somos testigos de cómo una y otra facción parlamentaria se han especializado en bloquear consistentemente cualquier iniciativa procedente del Ejecutivo o de su partido. Se dice que entre la filas del PRI existen dos tendencias: una encaminada a cooperar con el Gobierno, y otra decidida a hacerle la vida imposible. En cuanto al PRD, ya sabemos que su vocación es la de obstruir, destruir e imposibilitar el progreso de México, a menos que el que lo impulse provenga de su partido.

A la enorme decepción por la incapacidad, ineptitud e intransigencia del Gobierno del señor Fox, habremos de añadir la monumental traición del PAN a sus principios y a los que lo llevaron al poder votando por sus candidatos durante la última elección.

Resulta que, durante el debate, análisis y votación de la tan sobada Reforma Fiscal Integral, los Legisladores y operadores de dicho partido verdaderamente "enseñaron el cobre". Por unos cuantos céntimos, que es lo que finalmente van a recaudar con el engendro de miscelánea que aprobaron, renunciaron a los principios del PAN, a las promesas de campaña y al más elemental sentido común. "Vendiendo su alma al diablo", acabaron adoptando la plataforma ideológica del PRD, que fue el partido mayormente repudiado por el electorado en las elecciones presidenciales. A fin de cuentas, y después de ver el costo político resultante de aprobar el bodrio que aprobaron (el 98 por ciento de la población reprueba la...

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