Jorge Alcocer V. / Desprecio por los pluris
| Autor | Jorge Alcocer V. |
Con una mezcla de ignorancia y rencor, el delegado Mario Machuca soltó, en la mesa de Estatutos de la Asamblea del PRI, el pasado miércoles: "Los pluris son como los bonsái: cortos de ideas, salen caros y solo sirven de adorno". Consigna la nota que la leperada provocó "la ovación de los presentes". (Reforma 10/08/17, p. 4).
El delegado Machuca, con Ulises Ruiz alentando la porra, logró que en su partido se aprobara el escarnio y discriminación en contra de sus legisladores, federales y locales, electos por la vía de la representación proporcional, mejor conocidos como pluris. Gracias a la incultura y rencor de quienes aprobaron y celebraron la propuesta, los Estatutos del PRI dispondrán que los pluris del tricolor no pueden ser postulados a la reelección por esa misma vía y que tampoco podrán pasar de una Cámara a otra, o de una federal a una local, o viceversa, usando la misma fórmula. Queda por ver si el INE, y de ser el caso el TEPJF, consideran constitucional tal discriminación.
Las expectoraciones vertidas contra los pluris en la reunión del PRI en Campeche son reveladoras del origen del desprecio por los plurinominales. La figura, importada de Europa por don Jesús Reyes Heroles, fue tropicalizada por el ideólogo veracruzano a los fines de la reforma política de 1977, que fueron centralmente dos: legalizar al Partido Comunista Mexicano (PCM) y ampliar el espacio del que las oposiciones dispondrían en la Cámara de Diputados. Los plurinominales fueron originalmente introducidos al sistema electoral y a la representación popular como el espacio reservado a oposiciones no competitivas, unas reales (PAN, PCM, PDM) y otras satelizadas (PPS, PARM, PST), en el sistema de partido hegemónico (PRI) que de 1979 a 1985 no participó de la asignación de las curules (100) por ese principio.
Tengo en mi memoria los vitriólicos discursos -como el de Machuca- de los jilgueros del PRI, primero en Donceles y luego en San Lázaro, contra los diputados de oposición, por ser plurinominales. El desprecio que ese lado obscuro del priismo mantiene por los pluris está basado en la ignorancia de que su partido participa, desde 1988, de la asignación de curules, y a partir de 1997, de escaños de ese tipo, y que de entonces a hoy la mayoría de sus coordinadores parlamentarios y de sus legisladores destacados han llegado al Congreso federal, y a los congresos estatales, por esa vía.
Las curules plurinominales permiten la representación de minorías, que en un sistema...
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