Jorge Alcocer V. / Fracaso
| Autor | Jorge Alcocer V. |
El presidente Vicente Fox no tuvo éxito en su segundo intento de reforma fiscal, pero a cambio logró generar contra la Cámara de Diputados las críticas más ácidas. Victoria pírrica pues ni el Ejecutivo ni su secretario de Gobernación, responsable directo de la relación con el Congreso, han reparado en que, parafraseando al ranchero, con esos diputados tendrán que arar, hasta concluir el sexenio.
No comparto la satanización contra los diputados que rechazaron las propuestas de crear un IVA disfrazado para alimentos y medicinas. En primer lugar, no se trató de una propuesta del Ejecutivo, pues éste envió al Congreso una propuesta diferente. En segundo lugar, es evidente que se trataba de un conjunto de medidas desesperadas cuyo impacto recaudatorio nunca quedó claro. Pero aun si se hubiese tratado de propuestas suscritas directamente por el Presidente, es una flagrante contradicción que quienes antaño repudiaban al Congreso por su incondicional respaldo a todo lo que de Los Pinos venía, hogaño repudien a los diputados que niegan su voto a las iniciativas presidenciales. Quizá los que rechazaron las propuestas tributarias hicieron un favor a los contribuyentes al impedir que el caótico sistema tributario y el resquebrajado sistema de coordinación fiscal quedasen en peor situación de la que resulta de las vilipendiadas decisiones que finalmente adoptaron.
Insistir en cobrar IVA en alimentos y medicinas, cuando el PRI hizo del rechazo a tal medida el eje de su propaganda electoral era una locura. En teoría la propuesta puede ser aceptable, pero en la realidad afecta de manera sensible a la población de menores recursos, que en el caso de México comprende al 60 por ciento o más de las familias. Es cierto que el mayor beneficio de la tasa cero en esas mercancías, medido en términos absolutos, es para las familias de mayores ingresos, pero eso no resta un ápice de verdad al señalamiento de injusticia implícito en la propuesta rechazada. En efecto, para una familia de ingresos medios o elevados pagar un 10 por ciento de IVA en alimentos y medicinas, como lo propuso Vicente Fox, es soportable, pero para millones de familias pobres sería una catástrofe.
Reducir el IVA general al 10 por ciento es incongruente con la tesis gubernamental de convertir los impuestos al consumo en el eje del sistema tributario. La mayoría de los expertos coinciden en que con la tasa actual del 15 por ciento y un esfuerzo de combate a la evasión y elusión se podría obtener...
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