Entrevista / John Lee Hancock / Reconstruye historia de El Álamo

AutorGabriel Lerman

LOS ÁNGELES.- Conocedor tanto de la cultura texana como de la mexicana, John Lee Hancock se convirtió en el candidato perfecto para dirigir la nueva versión cinematográfica sobre la Batalla de El Alamo, sangriento enfrentamiento entre los independentistas que querían fundar la República de Texas y las fuerzas del mexicano Antonio López de Santa Anna, hecho que 168 años después sigue siendo motivo de debate a ambos lados de la frontera.

Hancock quedó al frente de la película El Alamo, con un presupuesto de 95 millones de dólares y próxima en estrenarse en México, cuando el realizador Ron Howard, ganador del Oscar por Una mente brillante, se retiró del proyecto.

Abogado y profesor de letras, Hancock ingresó a la industria del cine con el guión original de Un mundo perfecto, y luego fue contratado por Clint Eastwood para adaptar A medianoche en el jardín del bien y el mal. Aunque ya había dirigido la película independiente Vaya con Dios, pasó al cine de estudio con The Rookie, protagonizada por Dennis Quaid.

- ¿Es diferente su versión de El Alamo de la que quería hacer Ron Howard?

Me resultaría muy difícil saberlo, porque aunque Ron es uno de los productores de la película y hablamos mucho antes de que yo me sumara al proyecto, nunca supe exactamente qué era lo que él tenía en mente. Sólo sé que Ron estaba interesado en hacer una película con una estructura parecida a la de Traffic, de Steven Soderbergh, y yo estaba interesado en una estructura un poco más lineal.

- Hasta la película de John Wayne se hicieron muchísimos filmes sobre El Alamo, aún en la época del cine mudo, pero después del filme de Wayne, durante 40 años nadie se atrevió a tocar el tema, ¿a qué lo atribuye?

Cuando se trata de recrear para el cine hechos históricos, nos atrae hablar de batallas en donde un grupo reducido de gente logra sobrevivir el ataque de varios miles, como ocurrió en El Alamo. Es muy fácil entender el enfrentamiento entre David y Goliat, y ponerse del lado de David. Esa es una de las razones por las que la historia de El Alamo fue contada tantas veces, porque nos gustan las historias de los perdedores que logran superar la adversidad.

El Alamo es una de las mejores historias con esas características. Se hicieron unas tres películas antes que John Wayne hiciera la suya, pero como ésta se convirtió en un clásico, nunca nadie volvió a tocar el tema, porque pensaban que no había nada nuevo que pudieran aportar, aun cuando la versión de Wayne no era correcta desde el punto de vista histórico. Mucha gente piensa que lo que nosotros hemos hecho es un remake del trabajo de Wayne, y no es así. Ni de la Wayne ni de ninguna de las que se hicieron antes.

- ¿Qué cree que diría Wayne sobre su película si estuviera vivo?

Me gusta fabular con que le gustaría mucho. Creo que una de las ventajas de esta película es que ahora se sabe mucho más de lo que sabíamos en 1960 sobre lo ocurrido en El Alamo. Se han publicado libros sobre el tema y se han descubierto muchos documentos. Hay más información de la que Wayne disponía en aquel momento. De todos modos, cuando era niño y vi su versión de El Alamo, fue muy importante para mí como texano.

- Pero, entonces, la forma en que se describían las relaciones entre los diferentes grupos étnicos en Estados Unidos era diferente a como lo hace hoy Hollywood. Y la guerra entre Texas y México sigue causando cierto dolor entre los mexicanos que viven en Estados Unidos...

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