Javier Livas / 'Fake news'
| Autor | Javier Livas |
En mi análisis de por qué Donald Trump ganaría la elección en 2016 frente a Hillary Clinton ("Why Trump, Why Now", que puede verse en www.elnorte.com/ganatrump) el rol de la prensa norteamericana era un factor importante.
Si elegían a la señora, todo el sistema constitucional podría colapsarse con la complicidad y beneplácito de la prensa liberal. A mi juicio, los norteamericanos presintieron esa amenaza y por eso apoyaron a Trump. Algo les latió mal sobre la sinuosa Hillary.
Vale la pena repasar esa reflexión porque los países son como las personas: ambos están gobernados por su identidad y, en el caso de toda una nación, el orden constitucional viene siendo el plano de construcción.
Los fundadores de Estados Unidos crearon un experimento que resultó muy exitoso. Sigue vigente, pero estuvo y está aún peligrando. Nosotros en México hemos estado literalmente colgados de ese éxito, para bien y a veces para mal.
La Constitución norteamericana es un prodigio de equilibrios delicados. Los Estados frente a la Federación, los derechos individuales frente a las instituciones, el presente versus el futuro, la justicia frente a la seguridad, los pobres frente a los ricos, policías versus ladrones, etc.
Si esa estructura delicada se viniera abajo, podríamos jurar que todo el mundo libre peligraría. En ese sentido, Estados Unidos es el centro de nuestra galaxia.
En el equilibrio constitucional, las instituciones y la separación de Poderes están de un lado y los derechos individuales del otro. De haber ganado Hillary, tengo por seguro que hubiera aprovechado las llamadas "fake news" (noticias inventadas) para acabar de transformar a Estados Unidos en un bastión de izquierda como lo estuvo construyendo Barack Obama durante ocho años. Primero irían contra las armas y luego la religión.
Doy importancia al papel de las "fake news" -siguiendo el calificativo que usa Trump- porque en teoría están del lado del ciudadano, no del Gobierno. Son parte del delicado equilibrio de los individuos frente a las instituciones de Gobierno.
Sin embargo, es cada vez más obvio que hasta el FBI entró al juego de las noticias falsas para generar "pruebas" o evidencias de hechos que luego solicitaba a los tribunales que fueran investigados, de hecho, espiando y violando garantías a sus propios ciudadanos.
Las "fake...
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