Jaque Mate / Santiago Creel
| Autor | Sergio Sarmiento |
"Sólo triunfa quien pone la vela encarada con el aire que sopla; jamás quien espera que el aire sople hacia donde ha puesto la vela".
Antonio Machado
Es difícil pensar en un personaje más inusitado para contender a la Presidencia de la República en estos tiempos en que el populismo se enseñorea no sólo en México sino en toda la América latina. Por alcurnia y por apariencia, Santiago Creel parece más un aristócrata criollo de San Ángel -como ha sido llamado por amigos y enemigos- que un profesional del duro juego de la política mexicana. Esto hace que sus enemigos lo desprecien con facilidad. La pregunta es si el desprecio puede llevar al menosprecio y éste a la vez a la oportunidad de un triunfo en el 2006.
En comparación con el priista Roberto Madrazo y el perredista Andrés Manuel López Obrador, e incluso con sus correligionarios Felipe Calderón y Pancho Barrio, Creel es un virtual novato de la política. Nacido el 11 de diciembre de 1954, durante años su carrera profesional se limitó a la práctica del derecho en el prestigiado despacho de Noriega, Escobedo y Asociados y a la fundación del departamento de derecho en el Instituto Tecnológico Autónomo de México, el ITAM.
Su ingreso a la vida pública tuvo lugar apenas en 1993, cuando tenía ya 39 años de edad. Participó entonces en la comisión de vigilancia de la consulta realizada por Manuel Camacho Solís para la reforma política del Distrito Federal. En 1994 se integró al Grupo San Ángel y posteriormente fue seleccionado como consejero electoral del primer IFE. Empezó a colaborar también en el periódico Reforma.
En 1995 comenzó la compleja relación de Creel con Madrazo y López Obrador, quienes serían sus más probables oponentes en la elección constitucional del 2006, si gana la candidatura del PAN. El primer secretario de gobernación de Ernesto Zedillo, Esteban Moctezuma, le pidió participar, junto con el también consejero electoral José Agustín Ortiz Pinchetti, en un análisis de las elecciones de Tabasco de 1994 en que habían contendido Madrazo y López Obrador. La conclusión fue que las elecciones habían estado plagadas de irregularidades y debían anularse. Los consejeros federales, sin embargo, no tenían un mandato legal por lo que su consejo fue desoído. Más tarde Madrazo habría de manifestar su odio por Creel al presentarse en la Cámara de Diputados con un parche en un ojo para equipararlo con Catalina Creel, la villana de la clásica telenovela "Cuna de lobos".
Creel fue uno de los...
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