Ivaginaria / Mastúrbate como profesional...

Betty Dodson es una masturbadora profesional de noventa años que ha entrenado a miles de mujeres en busca de un orgasmo. La idea de venirse , en las mujeres, en el cuerpo femenino, ha sido visibilizada desde hace relativamente poco, desde el siglo pasado apenas, al romper la idea tabuada de que las mujeres no sentían placer. Que más bien la consigna era suprimir el placer. Si la mujer aprendía a sentir rico o a moverse, empoderaba su sexualidad, algo que el machismo no quiere: porque luego nos volvemos putas...En otrora sólo las trabajadoras sexuales eran las que se sabroseaban y que estaban autorizadas a mostrarlo...Y tampoco es cierto. Esto es un negocio querido público, espero que estén conscientes que muchas trabajadoras sexuales y sus mismas morras, a veces quizás, les fingen orgasmos para que ya se estén sosiegos o que ya se vengan...

La idea de los orgasmos o de hacer venirse a una mujer, no era algo que se conceptualizara claramente. En la época victoriana cuando se inventó el dildo eléctrico (los falos para masturbarse existían desde tiempos remotos), no se asumía la noción de orgasmo como tal, pero sí se procuraban como un tratamiento médico. Los ginecólogos de la época dedeaban, literalmente, a las señoras para curarlas de la histeria. Un tratamiento que las damas se aplicaban cada semana, nada mensas, con el médico Mortimer Granville, quien fue un precursor de los dildos mecanizados y con funcionamiento eléctrico para tratar la histeria. El dildo eléctrico fue creado porque a Granville ya se le entumía la mano de tanto dedear señoras.

Eso fue en Londres en 1870. Para ese año aún se tenían nociones muy erradas de lo que era el placer y la anatomía femenina. Aún se creía en la histeria como una enfermedad que ponía a las mujeres irritables y sensibles. Algo que se estudiaba desde hace siglos, ya que el médico Galeno, había descrito ese padecimiento, cuando aún se pensaba que nuestro útero era un órgano que se movía por todo el cuerpo de la mujer. Ya en el medioevo fueron más "razonables" y decían que las mujeres en histeria padecían lo que llamaron "sofocación de la matriz", que era prácticamente que ellas estaban calientes, pero los aburridos remedios recomendaban a las mujeres que se casaran o que una matrona les hiciese un masaje vulvar o...

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